El músico encabezará una nueva etapa del proyecto Simanof en Estados Unidos
El proyecto pedagógico del maestro Liendo, inspirado en el Sistema de Orquestas de Venezuela, comenzará durante la Semana Santa, con dos recitales los días 15 y 17 de abril
Especial.- El chelista venezolano Benito Liendo abrirá en la ciudad de Orlando, en Estados Unidos, una extensión del programa de formación musical de la Fundación Orquestal Siman (Simanof, por sus siglas en inglés), una iniciativa basada en el Sistema de Orquestas de Venezuela que suma 10 años dedicada a empoderar a niños y jóvenes mediante la música.
El proyecto pedagógico encabezado por el maestro Liendo comenzará durante la Semana Santa, con dos recitales los días 15 y 17 de abril, que tendrán lugar en The Rock Church de Orlando, donde interpretará Aleluya y You had me at the cross, acompañado en el piano por otro músico venezolano, José Manuel Uzcátegui.
“Vamos a iniciar esta nueva etapa de Simanof con dos presentaciones en el extraordinario coliseo de concierto que tiene esta iglesia, para anunciar por todo lo alto esta iniciativa a la comunidad y, al mismo tiempo, acompañar los encuentros espirituales de la cuaresma y la pascua, guiados por la pastora Lydia Withrow-Santiago”, comentó el maestro chelista.
Liendo explicó que en principio, el programa Simanof en Orlando tendrá como sede principal The Rock Church y posteriormente esperan llegar a otras comunidades. Para la pastora Lydia Withrow-Santiago, la pascua “es un tiempo de milagros” como esta noticia “grandiosa” llena de esperanza para la comunidad de creyentes que acuden a la iglesia y que pueden “recargar energías” a través de la música.
La directora Susan Siman, fundadora de Simanof, creó esta fundación sin fines de lucro inspirada en su trabajo en Venezuela con el maestro José Antonio Abreu, para contribuir con la más alta formación orquestal de niños y jóvenes, con el fin de brindarles una oportunidad de crecimiento profesional y personal. La sede principal del programa está ubicada en Miami, y cuenta con una extensión en Texas y con múltiples proyectos en varias ciudades de Estados Unidos. Benito Liendo se incorporó a la Orquesta Siman en agosto del año pasado como docente de violonchelo y ahora llevará esta iniciativa a la ciudad de Orlando, en compañía de José Manuel Uzcátegui, quien se ha destacado también como director de orquesta y arreglista.
Benito Liendo surgió de las agrupaciones del Sistema Nacional de Orquestas Infantiles y Juveniles, y ha integrado las filas de la Sinfónica Gran Mariscal de Ayacucho, el Ensamble de Violoncello “Simón Bolívar”, la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela, la Filarmónica de la Municipalidad de Guayaquil y la Orquesta Sinfónica de Guayaquil, estas últimas en Ecuador.
Se formó en la Academia Latinoamericana de Violoncello y ha recibido clases de reconocidos maestros internacionales del chelo. A lo largo de su carrera musical, ha sido profesor de nuevas generaciones de chelistas en Venezuela, Ecuador y Estados Unidos.
Liendo ha participado en giras internacionales en América, Europa y Asia, con directores de reconocimiento internacional y, especialmente, con la Sinfónica “Simón Bolívar” de Venezuela, bajo la batuta del maestro Gustavo Dudamel.
Para mayor información, se puede consultar el sitio www.simanof.com y la cuenta de Instagram @siman_orchestral_foundation
El 17 de noviembre conmemora el Día Internacional del Síndrome de Smith Magenis, un hito que destaca la relevancia de esta condición genética descubierta en los años 80 por Ana Smith y Ellen Magenis, una pionera en genética molecular. Este síndrome, vinculado a una deficiencia en el cromosoma 17, afecta aproximadamente a 1 persona de cada 15.000/25.000 nacimientos, manifestándose con una variedad de síntomas físicos y conductuales, acompañados de un retraso mental de gravedad variable y anomalías congénitas. Las asociaciones dedicadas al Síndrome de Smith Magenis organizan eventos con el objetivo claro de sensibilizar tanto a la población en general como a los profesionales de la salud. Entre las metas fundamentales de estas iniciativas se encuentran: Impulsar la Detección Precoz: Fomentar la identificación temprana de la enfermedad, garantizando un abordaje más efectivo desde sus primeras etapas. Atender las Necesidades de los Afectados: Buscar soluciones integrales que aborden las necesidades terapéuticas, educativas y asistenciales de quienes conviven con este síndrome, así como proporcionar un sólido apoyo a sus familias. Promover la Investigación: Lanzar un llamamiento apasionado a la investigación, destacando la importancia de explorar y comprender más a fondo esta patología para mejorar la calidad de vida de quienes la padecen. Generar Conciencia Pública: Ampliar el conocimiento general sobre el Síndrome de Smith Magenis es esencial. Con campañas educativas, se busca sensibilizar a la población acerca de la existencia de esta condición y fomentar la empatía y la comprensión.
El Día de los Muertos es una festividad tradicional mexicana que tiene raíces profundas en la cultura indígena precolombina de México, especialmente entre los pueblos aztecas, mayas, purepechas y totonacas. Esta celebración se lleva a cabo el 1 y 2 de noviembre, coincidiendo con el Día de Todos los Santos y el Día de los Muertos en el calendario católico, lo que es una muestra de la fusión de las tradiciones indígenas y europeas después de la conquista española en el siglo XVI. Las razones por las cuales se celebra el Día de los Muertos en México son variadas: Conexión con las creencias indígenas: Los pueblos indígenas de México tenían una profunda conexión con la muerte y creían que la vida después de la muerte era una parte natural del ciclo de la vida. Celebraban a sus muertos a través de rituales y ofrendas mucho antes de la llegada de los españoles. Sincretismo religioso: Después de la conquista española, la religión católica se combinó con las creencias indígenas para dar lugar a esta festividad. Los colonizadores españoles intentaron reemplazar las creencias indígenas con las suyas, pero en lugar de erradicar las tradiciones preexistentes, se incorporaron elementos católicos en la celebración de los muertos. Homenaje a los seres queridos fallecidos: El Día de los Muertos es una forma de honrar y recordar a los seres queridos que han fallecido. Las familias crean altares o ofrendas que incluyen fotos, velas, flores, alimentos y objetos personales de los difuntos para recibir sus espíritus y celebrar su memoria. Celebración de la vida: Aunque pueda parecer paradójico, el Día de los Muertos no es una festividad triste, sino más bien una celebración de la vida. Se cree que durante estos días, los difuntos regresan a visitar a sus seres queridos, y se les recibe con música, baile y comida. Conservación de la identidad cultural: El Día de los Muertos es una de las festividades más importantes en la cultura mexicana, y su celebración contribuye a la preservación de las tradiciones y la identidad cultural del país. En resumen, el Día de los Muertos en México es una festividad arraigada en las creencias indígenas, el sincretismo religioso y la conexión con los seres queridos fallecidos. Es una celebración única que combina elementos de alegría, respeto y espiritualidad, y juega un papel importante en la cultura mexicana.