El parque nacional Los Médanos de Coro es un parque nacional ubicado en el estado Falcón, en la jurisdicción de los municipios Miranda, Colina y Falcón, en el noroeste de Venezuela. Su área más importante está circunscrita alrededor del istmo, en la vía a la Península de Paraguaná al costado norte de la ciudad de Santa Ana de Coro.
El istmo comprende una faja de 30 km de largo por 5 km de ancho. Posee una altura media de 20 msnm (metros sobre el nivel del mar). Sus acumulaciones arenosas se desplazan de forma cambiante debido a la acción de los vientos alisios que soplan de este a oeste. Los Médanos de Coro fueron declarados parque nacional el 6 de febrero de 1974, abarca una superficie de 91.280 hectáreas, de las cuales 42.160 son tierras continentales y 49.120 son superficie marina.
Los Médanos de Coro son formaciones de arena características del relieve del estado Falcon, siendo este parte del sistema Lara-Falcón por sus dunas que sobrepasan los 8 msnm.
Este parque nacional preserva el área protegida más cercana al Golfo de Venezuela. Además, preserva un muy vulnerable desierto costero y a su vez una costa llena de Manglares.
Los Médanos de Coro fueron declarados parque nacional debido a su belleza natural y por mantener el concepto de Bioma desértico, además de ser el único desierto de la costa del Caribe en estar siempre en movimiento y que cada médano sobrepasa los 8 msnm. También se protege una fosa marina con mangles.
Las vías de acceso a Los Médanos son varias, sin embargo las más comunes son: la entrada desde el Paseo “Monseñor Iturriza”, o por la autopista Coro-Punto Fijo.
Fuente: Wikipedia
El 17 de noviembre conmemora el Día Internacional del Síndrome de Smith Magenis, un hito que destaca la relevancia de esta condición genética descubierta en los años 80 por Ana Smith y Ellen Magenis, una pionera en genética molecular. Este síndrome, vinculado a una deficiencia en el cromosoma 17, afecta aproximadamente a 1 persona de cada 15.000/25.000 nacimientos, manifestándose con una variedad de síntomas físicos y conductuales, acompañados de un retraso mental de gravedad variable y anomalías congénitas. Las asociaciones dedicadas al Síndrome de Smith Magenis organizan eventos con el objetivo claro de sensibilizar tanto a la población en general como a los profesionales de la salud. Entre las metas fundamentales de estas iniciativas se encuentran: Impulsar la Detección Precoz: Fomentar la identificación temprana de la enfermedad, garantizando un abordaje más efectivo desde sus primeras etapas. Atender las Necesidades de los Afectados: Buscar soluciones integrales que aborden las necesidades terapéuticas, educativas y asistenciales de quienes conviven con este síndrome, así como proporcionar un sólido apoyo a sus familias. Promover la Investigación: Lanzar un llamamiento apasionado a la investigación, destacando la importancia de explorar y comprender más a fondo esta patología para mejorar la calidad de vida de quienes la padecen. Generar Conciencia Pública: Ampliar el conocimiento general sobre el Síndrome de Smith Magenis es esencial. Con campañas educativas, se busca sensibilizar a la población acerca de la existencia de esta condición y fomentar la empatía y la comprensión.
El Día de los Muertos es una festividad tradicional mexicana que tiene raíces profundas en la cultura indígena precolombina de México, especialmente entre los pueblos aztecas, mayas, purepechas y totonacas. Esta celebración se lleva a cabo el 1 y 2 de noviembre, coincidiendo con el Día de Todos los Santos y el Día de los Muertos en el calendario católico, lo que es una muestra de la fusión de las tradiciones indígenas y europeas después de la conquista española en el siglo XVI. Las razones por las cuales se celebra el Día de los Muertos en México son variadas: Conexión con las creencias indígenas: Los pueblos indígenas de México tenían una profunda conexión con la muerte y creían que la vida después de la muerte era una parte natural del ciclo de la vida. Celebraban a sus muertos a través de rituales y ofrendas mucho antes de la llegada de los españoles. Sincretismo religioso: Después de la conquista española, la religión católica se combinó con las creencias indígenas para dar lugar a esta festividad. Los colonizadores españoles intentaron reemplazar las creencias indígenas con las suyas, pero en lugar de erradicar las tradiciones preexistentes, se incorporaron elementos católicos en la celebración de los muertos. Homenaje a los seres queridos fallecidos: El Día de los Muertos es una forma de honrar y recordar a los seres queridos que han fallecido. Las familias crean altares o ofrendas que incluyen fotos, velas, flores, alimentos y objetos personales de los difuntos para recibir sus espíritus y celebrar su memoria. Celebración de la vida: Aunque pueda parecer paradójico, el Día de los Muertos no es una festividad triste, sino más bien una celebración de la vida. Se cree que durante estos días, los difuntos regresan a visitar a sus seres queridos, y se les recibe con música, baile y comida. Conservación de la identidad cultural: El Día de los Muertos es una de las festividades más importantes en la cultura mexicana, y su celebración contribuye a la preservación de las tradiciones y la identidad cultural del país. En resumen, el Día de los Muertos en México es una festividad arraigada en las creencias indígenas, el sincretismo religioso y la conexión con los seres queridos fallecidos. Es una celebración única que combina elementos de alegría, respeto y espiritualidad, y juega un papel importante en la cultura mexicana.