12 de septiembre Día Internacional de la Migraña
Para el neurólogo del GMSP Óscar González, el primer paso es identificar los factores desencadenantes, entre ellos la ansiedad, algunos alimentos y bebidas, factores ambientales e incluso el virus SARS Covid 19
La migraña es una de las 20 enfermedades más incapacitantes de los seres humanos en todo el mundo. Se estima que al menos el 20% de la población la sufre, según las estadísticas de la Organización Mundial de la Salud.
A propósito de celebrarse el próximo 12 de septiembre el Día Internacional de la Acción contra la Migraña, el neurointensivista Oscar González, especialista del Grupo Médico Santa Paula, (GMSP), explica que es una patología que se caracteriza por una fuerte cefalea, y puede surgir a cualquier edad. “La mayoría de los casos ocurren entre los 20 y 50 años de edad. Sin embargo, se suele ver en edad pediátrica, siendo más frecuente en varones antes de la pubertad, y en hembras después de esta etapa, manteniéndose hasta la adultez”.
Entre los factores desencadenantes de esta patología, el especialista señala que el 70% de los pacientes reconoce, entre los más comunes: la ansiedad, la menstruación, el ayuno o las variaciones del horario de sueño. En el caso de los alimentos, se mencionan los quesos, embutidos, chocolates, zumos de fruta, alcohol, helados, hamburguesas e incluso algunas salsas chinas.
Agrega que, varios estudios a nivel mundial analizaron el impacto socioeconómico causado en el año 2016 y delataban que 1,04 millones de personas sufrieron de migraña, lo que representa a 45.1 millones de años vividos con dolor. “La migraña además está relacionada con bajos índices de calidad de vida, con el estado de salud, la pérdida de productividad y elevado consumo de servicios hospitalarios”.
Causas de la migraña
Refiere el neurointensivista que, para muchos es considera una enfermedad de carácter hereditario; sin embargo, no hay precisión en cuanto a los factores genéticos y ambientales que influyen en ella. “La Sociedad Internacional de Cefaleas aún no ha determinado marcadores biológicos o de neuroimagen, que permitan establecer un diagnóstico seguro. Una cefalea primaria puede ocurrir con síntomas tales como náuseas, vómitos o sensibilidad a la luz y al sonido. En muchas personas se siente un dolor pulsátil, únicamente en un lado de la cabeza”, explica el especialista.
Detalla que el dolor que se siente no es en el cerebro, y advierte que “órgano no duele; sino los grandes senos venosos, las meninges próximas, las arterias de la duramadre y base del cráneo, así como el resto de las estructuras extra cerebrales. Los dolores son procesos por encima de la tienda del cerebelo (hemisferios cerebrales) que se proyectan por los nervios craneanos”.
Expone que otro tipo de cefalea es la violenta y aparece como resultado de una inflamación o distorsión de las estructuras encefálicas sensibles al dolor.
“Aun cuando cabe admitir que la cefalea no es una enfermedad peligrosa, en la gran mayoría de los casos, debe tomarse en serio, pues puede poner al médico en la pista de otra enfermedad grave. Lo importante es saber diferenciar y establecer cuándo una cefalea es de origen primario y cuáles son secundarios o por causas sistémicas”.
Tratamientos de la migraña
Ante la presencia recurrente de este tipo de cuadro clínico de dolor, el doctor González explica que es necesario acudir al neurólogo. “Este tipo de cuadro clínico puede ser producto de cuadros banales, infecciosos del sistema nervioso central (meningitis, encefalitis, abscesos), hasta tumores y, en los actuales momentos, como síntoma cardinal en infecciones del SARS Covid 19.”
Los tratamientos pueden ir desde los más conservadores con fármacos, como Paracetamol, Ibuprofeno, Triptanes, Flunarizina o Propanolo, hasta terapias. “Se han publicado tres estudios de alta calidad sobre terapia no farmacológica. Uno sobre la importancia del ejercicio anaeróbico, otro sobre terapia psicológica y, el tercero sobre terapia de estimulación magnética transcerebral y estimulación con corriente directa transcraneal”.
Detalla el doctor González que, la Sociedad Internacional de las Cefaleas recomienda como objetivo principal en el tratamiento de las migrañas, la reducción de la frecuencia de los episodios de dolor.
“En el GMSP estamos conscientes de la importancia del correcto tratamiento para pacientes que sufren de esta patología. Por ello, contamos con profesionales altamente cualificados en el área neurológica y en el ejercicio terapéutico. Además de un equipo de especialistas en el área de la psicología, con el fin de poder ofrecer a nuestros pacientes la mejor y más actualizada atención médica”.
Recomendaciones para controlar la migraña
El especialista debe ayudar a identificar qué factores son desencadenantes, pues es el primer paso para desarrollar una terapia eficaz. En este sentido, el experto del GMSP recomienda mantener buenos hábitos de vida e higiene, controlar los desencadenantes y reducir las situaciones que detonan la aparición de los episodios. Algunos de ellos dependen del paciente, como por ejemplo: el estrés, la ansiedad, los cambios hormonales, el hambre y la fatiga; el insomnio, la hipersomnia y el desorden emocional.
Existen otros factores que influyen en los episodios de la migraña, que dependen del medio como por ejemplo, la luz intensa, ruidos, olores, cambios atmosféricos; alimentos como el chocolate, zumos, helados, salsas; así como el tabaco y el glutamato sódico (Potenciadores de sabor)
El tercer lunes de enero es el día más triste del año. El Blue Monday, o Lunes Triste, es un fenómeno que ha capturado la atención de muchos, especialmente a nivel emocional y psicológico. Según el psicólogo Cliff Arnald, este día, que ocurre el tercer lunes de enero, es considerado el más triste del año. La combinación de factores emocionales y físicos que afectan a las personas durante este período contribuye a que muchos lo vivan con un sentimiento de depresión o desánimo. Tras las celebraciones navideñas, muchas familias aún no se han recuperado, tanto a nivel económico como emocional. Los excesos durante las fiestas, la falta de rutinas y el descontrol de la temporada festiva generan un desequilibrio en la vida diaria de las personas. A esto se suma la presión de los propósitos de Año Nuevo, que suelen parecer más difíciles de alcanzar conforme avanzan los días. Las metas, que en un inicio se veían como una motivación, se convierten en un recordatorio de las dificultades por superar, lo que provoca una profunda decepción. Este contexto emocional se ve reflejado en un alto índice de personas que sienten que sus expectativas para el inicio del año se desmoronan rápidamente. El Blue Monday se convierte así en un día emblemático para aquellos que se enfrentan a esta realidad emocional. Sin embargo, más allá del fenómeno en sí, es importante considerar que este sentimiento de tristeza puede ser superado si se cuentan con las herramientas adecuadas para enfrentar los desafíos personales, laborales y emocionales. Es fundamental reconocer este fenómeno como un proceso natural y tomar conciencia de la importancia de la salud mental para poder seguir adelante con una actitud positiva y resiliente. https://www.tiktok.com/@mscnoticias
La celebración del Espíritu de la Navidad es una tradición que combina elementos espirituales y culturales, especialmente popular en varios países de América Latina y algunas partes de Europa. Esta festividad ocurre el 21 de diciembre, coincidiendo con el solsticio de invierno en el hemisferio norte, marcando el día más corto y la noche más larga del año. Se considera un momento de reflexión, renovación y apertura para atraer energías positivas, armonía y prosperidad. Origen y significado Aunque no tiene un origen religioso específico, la celebración está vinculada al simbolismo de la luz que vence a la oscuridad, un concepto presente en muchas culturas. En esta fecha, se invita al Espíritu de la Navidad, una entidad simbólica asociada con la abundancia, el amor y la paz, a llenar los hogares con bendiciones. Rituales comunes Durante la noche del 21 de diciembre, las familias suelen reunirse para realizar rituales que promuevan la armonía y la prosperidad. Algunos de estos incluyen: Escribir deseos: Se escriben en papel los anhelos para el próximo año, tanto personales como colectivos. Limpiezas energéticas: Se realizan limpiezas en el hogar con incienso, velas aromáticas o aceites esenciales para atraer buenas energías. Cena especial: Se comparte una comida sencilla, generalmente vegetariana, en un ambiente de gratitud. Donaciones: Se fomenta el acto de dar, ya sea con regalos simbólicos o ayuda a quienes lo necesitan. Significado actual Hoy en día, el Espíritu de la Navidad es visto como una oportunidad para conectarse con lo esencial, reflexionar sobre el año que termina y proyectar intenciones positivas para el futuro. Más allá de las creencias personales, es una práctica que invita a valorar la gratitud, el amor y la generosidad como pilares para iniciar un nuevo ciclo. https://www.tiktok.com/@mscnoticias