Unimet crea Programa de Asistencia Temporal para atender las necesidades económicas creadas durante la pandemia
A un año de que fuera decretada la cuarentena social en Venezuela, la población continúa enfrentándose a los desafíos y secuelas, producto de la pandemia por la Covid-19. La vida de millones de personas alrededor del mundo se vio afectada debido al confinamiento, que impactó de forma negativa en la economía de los hogares.
La Unimet es consciente de que esta es la realidad de tantas familias cuyos hijos hacen vida universitaria en esta casa de estudios, por lo que el Consejo Superior en su reunión ordinaria N° 396, efectuada el pasado 15 de marzo de 2021, aprobó el Reglamento del Programa de Asistencia Temporal (PAT), un nuevo beneficio socioeconómico que estará disponible para aquellos estudiantes a quienes se les dificulta estar al día con el pago de la matrícula y que estará activo durante contingencias locales, nacionales o mundiales. Podrán aplicar alumnos de Pregrado y Postgrado con situación de vulnerabilidad socioeconómica comprobada.
Cledy Parejo, directora de la Dirección de Apoyo Socioeconómico Estudiantil (DASE) de la Universidad Metropolitana, resaltó que este beneficio atenderá únicamente situaciones de vulnerabilidad relacionadas de forma directa con la pandemia. “Por ejemplo, si uno de los padres del estudiante perdió su empleo durante el confinamiento, y ya no cuentan con el sueldo que sustentaba el hogar, entonces ese estudiante sería apto para solicitar este beneficio”.
De acuerdo con la secretario general de la Unimet, Mirian Rodríguez de Mezoa, la pandemia ha incrementado el número de solicitudes de apoyo estudiantil. “Esto ha impactado a muchas familias venezolanas que han estado padeciendo problemas derivados de esta contingencia que afecta a la sociedad global: reducción de sueldos, pérdida de trabajo, decesos en el seno familiar, incremento de gastos para la salud, etc.”
Señala que esto refuerza el compromiso de la Universidad con contribuir a evitar la deserción estudiantil por razones económicas; “con visión preventiva y no reactiva”.
Requerimientos del beneficiario
En el caso de que haya grupos de hermanos dentro de la universidad, solo uno de ellos podrá solicitar la ayuda económica. Para aplicar, se exigirá un año académico cursado (Pregrado) y un trimestre (Postgrado) y contar con un IAA de 14 puntos o superior; inscripción mínima de 12 UC trimestrales para Pregrado y de 6 UC para Postgrado.
Así mismo, la directora de Dase señaló que no será combinable con otros programas de Beneficio Socioeconómico (BSE) y tendrá una duración de hasta 3 trimestres regulares, revisable trimestralmente. El estudiante que se le apruebe el beneficio tendrá la oportunidad de contar con una cobertura de hasta 50% de la matrícula, monto que decidirá durante la evaluación realizada por esta unidad del Decanato de Estudiantes.
No estará disponible para quienes realicen estudios simultáneos, ya que solo cubrirá un plan de estudios. En el caso de Postgrado, solo aplicará para planes de estudios conducentes a título. (Maestrías y Especializaciones).
Compromiso con los estudiantes
Desde su creación, la Unimet se ha caracterizado por formar profesionales integrales en el marco de un modelo educativo distintivo e innovador y, por otra parte, por su responsabilidad social. Así lo asegura la Secretario General, destacando que en la Universidad siempre ha existido “esa vocación natural y esa sensibilidad social por el talento de jóvenes que, teniendo comprobadas habilidades cognitivas para ingresar a la universidad, carecen de músculo económico para mantenerse en ella, por lo que sin un debido apoyo económico no pudieran acceder a una educación superior de calidad”.
“Desde sus inicios, la Unimet siempre ofreció becas, pero en los últimos años ha habido un especial esfuerzo por fortalecer nuestro sistema de beneficios socioeconómicos. Tan es así que hacia 2010, la población estudiantil beneficiaria, alcanzaba un 12% de la población estudiantil hasta entonces, solo de pregrado. Actualmente ese porcentaje alcanza el 30% de la población, es decir, el 30% goza de algún beneficio socioeconómico, no solo de pregrado sino además de postgrado”, explica.
Mirian Rodríguez de Mezoa señala que, hoy en día, la Unimet cuenta con casi 1.400 beneficiarios, “estudiantes de pregrado y postgrado gozando de alguno de nuestros programas socio económicos, con distintos porcentajes de descuento”.
Resalta que más del 60% de ellos están subsidiados completamente por el fondo de becas, el cual se nutre de los aportes de egresados y amigos de la Unimet y en general del sector privado. El resto está cubierto por los fondos del presupuesto de la institución.
El 17 de noviembre conmemora el Día Internacional del Síndrome de Smith Magenis, un hito que destaca la relevancia de esta condición genética descubierta en los años 80 por Ana Smith y Ellen Magenis, una pionera en genética molecular. Este síndrome, vinculado a una deficiencia en el cromosoma 17, afecta aproximadamente a 1 persona de cada 15.000/25.000 nacimientos, manifestándose con una variedad de síntomas físicos y conductuales, acompañados de un retraso mental de gravedad variable y anomalías congénitas. Las asociaciones dedicadas al Síndrome de Smith Magenis organizan eventos con el objetivo claro de sensibilizar tanto a la población en general como a los profesionales de la salud. Entre las metas fundamentales de estas iniciativas se encuentran: Impulsar la Detección Precoz: Fomentar la identificación temprana de la enfermedad, garantizando un abordaje más efectivo desde sus primeras etapas. Atender las Necesidades de los Afectados: Buscar soluciones integrales que aborden las necesidades terapéuticas, educativas y asistenciales de quienes conviven con este síndrome, así como proporcionar un sólido apoyo a sus familias. Promover la Investigación: Lanzar un llamamiento apasionado a la investigación, destacando la importancia de explorar y comprender más a fondo esta patología para mejorar la calidad de vida de quienes la padecen. Generar Conciencia Pública: Ampliar el conocimiento general sobre el Síndrome de Smith Magenis es esencial. Con campañas educativas, se busca sensibilizar a la población acerca de la existencia de esta condición y fomentar la empatía y la comprensión.
El Día de los Muertos es una festividad tradicional mexicana que tiene raíces profundas en la cultura indígena precolombina de México, especialmente entre los pueblos aztecas, mayas, purepechas y totonacas. Esta celebración se lleva a cabo el 1 y 2 de noviembre, coincidiendo con el Día de Todos los Santos y el Día de los Muertos en el calendario católico, lo que es una muestra de la fusión de las tradiciones indígenas y europeas después de la conquista española en el siglo XVI. Las razones por las cuales se celebra el Día de los Muertos en México son variadas: Conexión con las creencias indígenas: Los pueblos indígenas de México tenían una profunda conexión con la muerte y creían que la vida después de la muerte era una parte natural del ciclo de la vida. Celebraban a sus muertos a través de rituales y ofrendas mucho antes de la llegada de los españoles. Sincretismo religioso: Después de la conquista española, la religión católica se combinó con las creencias indígenas para dar lugar a esta festividad. Los colonizadores españoles intentaron reemplazar las creencias indígenas con las suyas, pero en lugar de erradicar las tradiciones preexistentes, se incorporaron elementos católicos en la celebración de los muertos. Homenaje a los seres queridos fallecidos: El Día de los Muertos es una forma de honrar y recordar a los seres queridos que han fallecido. Las familias crean altares o ofrendas que incluyen fotos, velas, flores, alimentos y objetos personales de los difuntos para recibir sus espíritus y celebrar su memoria. Celebración de la vida: Aunque pueda parecer paradójico, el Día de los Muertos no es una festividad triste, sino más bien una celebración de la vida. Se cree que durante estos días, los difuntos regresan a visitar a sus seres queridos, y se les recibe con música, baile y comida. Conservación de la identidad cultural: El Día de los Muertos es una de las festividades más importantes en la cultura mexicana, y su celebración contribuye a la preservación de las tradiciones y la identidad cultural del país. En resumen, el Día de los Muertos en México es una festividad arraigada en las creencias indígenas, el sincretismo religioso y la conexión con los seres queridos fallecidos. Es una celebración única que combina elementos de alegría, respeto y espiritualidad, y juega un papel importante en la cultura mexicana.