´Viaje al centro del fracaso. Una historia de gerencia´.
A través del género de la nóvela, los escritores venezolanos Luis Garmendia y Renzo Castillo, presentan una historia de gerencia actual, asociada al ejercicio del liderazgo, en un ambiente que muestra la particular idiosincrasia venezolana; de la cual se pueden obtener grandes aprendizajes.
Caracas, 5 de septiembre de 2016.- Todos los seres humanos quieren alcanzar el éxito, sea en lo personal o profesional y se niegan al fracaso. De hecho, liderazgo y éxito son temas comunes dentro de la literatura gerencial moderna. Sin embargo, dos escritores venezolanos rompen esquema y se atreven a escribir sobre el fracaso. ´Viaje al centro del fracaso. Una historia de gerencia´, es la novela que Luis Garmendia y Renzo Castillo acaban de lanzar al mercado para hacer dudar de teorías y dichos comunes en la práctica gerencial actual, generando un análisis profundo y apertura a nuevas ideas.
Luis Armando Garmendia y Renzo Castillo, ambos psicólogos, han dedicado veinte años de su vida a la consultoría empresarial, la cual han ejercido en Venezuela y otros países de América Latina como: Colombia, Panamá, Ecuador,
Argentina y Chile. La amplia experiencia en el estudio y la intervención en organizaciones, les ha permitido reseñar, en un formato novelado, sus observaciones sobre la trama de actitudes y las circunstancias que suelen desmoronar los grandes éxitos profesionales.
Según Garmendia el fracaso no ocurre por haberse separado de las prácticas que conducen al éxito, sino por haber comenzado a incurrir en unas que son propias del fracaso. “Definitivamente, el fracaso es un arte autónomo, sigue sus propias reglas, que merecen ser analizadas” y esto es precisamente lo que se plasma en la novela.
“Es tanta la admiración del éxito en estos días, que las personas optan por ignorar cualquier tema asociado al fracaso. Las razones que arguyen son diversas: ´eso no tiene que ver conmigo´, ´si pienso en negativo me irá mal´, ´eso es pavoso´. Lo cierto es que la gente sólo está dispuesta a considerar el fracaso cuando ha fracasado y es demasiado tarde”, comenta Garmendia, quien además asegura que si, por ejemplo, se ha alcanzado vencer terribles enfermedades, no ha sido, precisamente, evitando hablar sobre ellas. No es fácil evitar el fracaso si te resistes a conocer cómo funciona”.
Por su parte, Castillo explica que la novela presenta a un personaje real, creíble, lúcido y probablemente maquiavélico llamado Braulio Arellano, que descubre su fracaso demasiado tarde, y emprende una divertida peripecia en la que debatirá con autores consagrados, para tratar de enmendarlo.
“Lo más interesante de Braulio es que resume gran parte de las características de los líderes que hemos visto fracasar, o que han construido su éxito sobre cosas tan penosas como el agotamiento de sus equipos de trabajo, la frustración de los demás o enormes costos para la compañía. El lector descubrirá que, de alguna u otra forma, todos hemos tenido un jefe o un compañero de trabajo como Braulio Arellano o, quizás, tenemos un poco de Braulio en nuestro interior”.
´Viaje al centro del fracaso. Una historia de gerencia´ se puede conseguir en Tecni-Ciencia y Librería Kalathos. Como afirma el prologuista del libro, Víctor Roa Sánchez, “seducir es un arte, y creo que en este libro hay páginas e ideas suficientes para que el lector se deje llevar en las alas de una buena historia”.
Desde los cimientos del activismo ambiental hasta la urgente llamada a la acción de hoy, el Día de la Tierra ha evolucionado desde su modesto comienzo en 1968 hasta convertirse en un movimiento global que busca la preservación de nuestro planeta. En aquel entonces, el Servicio de Salud Pública de EE. UU. organizó el Simposio de Ecología Humana, un punto de partida crucial donde los estudiantes escucharon a científicos destacados hablar sobre los efectos del deterioro ambiental en la salud humana. Dos años más tarde, en 1970, el senador y activista ambiental Gaylord Nelson propuso la creación de una agencia ambiental, desencadenando una manifestación masiva que atrajo a miles de estudiantes y comunidades de todo Estados Unidos. Esta presión social culminó en la creación de la Agencia de Protección Ambiental y una serie de leyes destinadas a proteger nuestro medio ambiente, sentando así las bases para el movimiento ambiental moderno. En 1972, la primera Cumbre de la Tierra en Estocolmo reunió a líderes mundiales para abordar los problemas ambientales a escala global, marcando un hito en la conciencia ambiental mundial. El lema del Día Internacional de la Madre Tierra para el año 2024, “Planeta vs plásticos”, subraya la urgencia de abordar la crisis de los plásticos. La necesidad de reducir la producción de plásticos en un 60% para el año 2040 es imperativa, ya que estos contaminantes afectan directamente la salud humana y la salud del planeta. Es fundamental y urgente la necesidad de acabar con los plásticos por el bien de la salud humana y del planeta. Desde sus modestos inicios hasta su papel actual como plataforma para la conciencia ambiental global, el Día de la Tierra continúa inspirando a personas de todo el mundo a unirse en la lucha por un futuro sostenible. ¡Cada gesto cuenta en esta batalla por nuestro hogar compartido! https://www.tiktok.com/@mscnoticias
El Domingo de Ramos es el día que marca el inicio de la Semana Santa en la tradición cristiana, conmemorando la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. Este día está lleno de simbolismo y significado religioso para los cristianos, pero en términos de “misterios”, podrían interpretarse algunos aspectos simbólicos o teológicos: La entrada triunfal de Jesús: Este evento, mencionado en los evangelios, es la base del Domingo de Ramos. Jesús entra en Jerusalén montado en un burro, mientras la multitud lo aclama y lo saluda con ramas de palma y ropas extendidas en su camino. El misterio aquí radica en la comprensión del significado de esta entrada en el contexto de la misión de Jesús y su relación con el reino de Dios. El cambio de actitud de la multitud: Es intrigante cómo la multitud que aclama a Jesús en su entrada triunfal el Domingo de Ramos luego se convierte en la misma multitud que lo rechaza y pide su crucifixión pocos días después. Este cambio repentino de actitud puede ser objeto de reflexión sobre la naturaleza humana y la fragilidad de las lealtades populares. El simbolismo de las palmas y las ramas: En muchas tradiciones cristianas, se llevan palmas y ramas durante las celebraciones del Domingo de Ramos como símbolo de victoria y triunfo. Estos elementos pueden representar la victoria espiritual sobre el pecado y la muerte que Jesús trae consigo, pero también pueden ser interpretados como un recordatorio de la naturaleza efímera de los triunfos terrenales. El comienzo de la Semana Santa: El Domingo de Ramos marca el inicio de la Semana Santa, un período de intensa reflexión y conmemoración para los cristianos. Este tiempo está lleno de rituales y tradiciones que recuerdan los eventos finales de la vida de Jesús, desde la Última Cena hasta su crucifixión y resurrección. Los misterios aquí son los propios misterios de la fe cristiana: la pasión, muerte y resurrección de Jesús, y su significado para la salvación de la humanidad. En resumen, el Domingo de Ramos está envuelto en una serie de misterios religiosos y simbolismos que invitan a la reflexión y la contemplación sobre la fe cristiana y el significado de la vida y la obra de Jesucristo. https://www.tiktok.com/@mscnoticias