La primera semana de agosto de cada año se celebran, a nivel mundial, actividades especiales para apoyar y promover que las madres tengan las facilidades necesarias para amamantar a sus hijos recién nacidos
La lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida permite que los bebés puedan obtener todos los nutrientes que requieren. Posteriormente, se puede seguir amamantando, incluso hasta los dos años y más, pero complementando alimentación con otros nutrientes como frutas, verduras, vegetales y proteínas animales. Esto no solo fortalece el desarrollo de los infantes, sino que beneficia también a sus madres al prevenir enfermedades en ambos.
Para apoyar y promover el amamantamiento de los bebés, los primeros días de agosto de cada año se celebra la Semana Mundial de la Lactancia Materna, cuyo lema para el 2023 es “Amamantar y trabajar: ¡hagamos que sea posible!”, impulsada por la Alianza Mundial pro Lactancia Materna (WABA).
La pediatra neonatóloga y consultora internacional de Lactancia Materna, doctora Eunice Lample (@eunicelample), quien apoya al Grupo Médico Santa Paula (GMSP), afirmó que este año con esta conmemoración se busca que se cumplan las leyes que impulsan la lactancia materna, las cuales tienen el objetivo de facilitar, mediante permisos laborales de descanso, el entorno de las madres para que puedan lactar con mayor tranquilidad, y el de los padres, para que cuiden a su bebé.
Expresó que para que los permisos se cumplan y las madres tengan una lactancia exitosa, es importante que ellas reciban apoyo de parte de las políticas públicas, los establecimientos de salud, la familia, el entorno social, y los medios de comunicación.
Asimismo, para que el proceso de lactancia se realice de forma adecuada, las madres deben buscar información y apoyo para lograr un proceso de lactancia exitoso, afirmó la doctora Lample.
La leche de la madre “es el alimento por excelencia de los niños, porque es el que les proporciona absolutamente todos los nutrientes que necesitan en sus primeros dos años de vida, y en cada una de las etapas de su desarrollo”, explicó.
Señaló que la leche materna contiene anticuerpos especiales que protegen a los niños de infecciones respiratorias y de oído, gripe, asma, alergias e intolerancias y la obesidad, que en los niños es uno de los grandes estigmas actuales. Además, es de fácil digestión, evita el estreñimiento y la diarrea, contribuye con el desarrollo de la inteligencia, y de una dentadura sana y fuerte.
Asimismo, la lactancia materna ayuda a prevenir enfermedades como diabetes; afecciones cardiovasculares; el síndrome metabólico del adulto, por lo que ofrece protección contra patologías que los niños pudiesen padecer en la adultez; entre otras, según la doctora.
Amamantar también es beneficioso para la salud de las madres, ya que previene el cáncer de mama y de ovario, ayuda a disminuir el sangrado postparto y a recuperar el peso, retarda la aparición de la menstruación y un nuevo embarazo, y aumenta su autoestima al permitir que sean directamente responsables de la salud de sus bebés, informó.
Calidad y seguridad
Refirió que “la leche materna es calidad de vida y seguridad alimentaria”, y debe ser el alimento exclusivo de los niños en sus primeros seis meses de vida. Añadió que después de los dos años, los infantes consumen lo que se prepara en su casa, pero pueden mantener la lactancia siempre que ellos y las madres quieran.
En el caso de las madres, estas no necesitan una dieta especial para amamantar, pero sí tiene que ser balanceada e incluir todos los componentes nutricionales. Al igual que en la fase del embarazo, se aconseja no comer alimentos enlatados ni crudos, no beber refrescos ni alcohol, no tomar café en exceso, y disminuir el consumo de lácteos porque estos pueden generar intolerancia en los bebés, “que se produce es únicamente por la leche de vaca que la madre consume, ya que los niños no pueden ser alérgicos a la leche materna”.
Resaltó que la leche materna siempre es de buena calidad, pero en el caso de las madres con algún grado de desnutrición, puede ocurrir que falten oligoelementos y grasa, por eso es importante supervisar y fortalecer la alimentación de ellas, pero no se recomienda sustituir la lactancia natural porque aporta una proteína de alto valor biológico, biodisponible para los bebés.
Aclaró que existen casos extremos en los que un bebé no puede recibir lactancia materna, como aquellos en los que su mamá está gravemente enferma, no produce leche por un tumor hipofisario, se sometió a una mastectomía o falleció.
Si la madre está grave de salud, el bebé debe tener un alimento sustituto, pero luego de que la mamá supere el cuadro agudo de enfermedad, se puede reiniciar la lactancia.
En una mamá que se encuentre sana, lo ideal es que amamante a su bebé, y si se encuentra en un estado desfavorable de salud, debe tratarse para poder alimentarlo con leche materna si es posible, puesto que, a diferencia de la lactancia, las fórmulas no ofrecen inmunidad.
Para ser atendido en el GMSP y obtener mayor información se puede comunicar a través de WhatsApp por el número al (0414) (0412) (0424) CLINICA (2546422), así como a través de la web www.grupomedicosp.com/ donde se puede reservar una cita, o seguirlos como @grupomedicosp en las redes sociales Instagram, Facebook y Twitter.
La Organización de las Naciones Unidas proclama el 18 de septiembre como Día Internacional de la Igualdad Salarial, con la finalidad de resaltar la importancia de equipar la igualdad salarial por un trabajo de igual valor. La igualdad salarial o igualdad de remuneración se refiere al derecho de hombres y mujeres a recibir una remuneración equitativa por trabajos de igual valor. Este concepto considera factores como competencias, condiciones laborales, calificaciones y niveles de responsabilidad en el desempeño del puesto. Además, la igualdad salarial refuerza los derechos humanos y la igualdad de género, y cuenta con el respaldo de actores clave como la comunidad internacional, la sociedad civil, agencias de ONU Mujeres, los Estados Miembros y la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Como antecedente histórico, tras la Segunda Guerra Mundial, en 1951 se estableció el Convenio sobre Igualdad de Remuneración, reconocido como el primer instrumento internacional que impulsó la incorporación masiva de las mujeres al mundo laboral, ocupando posiciones en la primera línea de producción en varios países. La creación de este convenio surgió como respuesta a la desigualdad salarial, vista como una clara forma de discriminación laboral. Este hito marcó el comienzo de un avance significativo hacia una mayor igualdad de género en el mercado laboral, estableciendo las bases para eliminar brechas económicas y promover un entorno laboral más justo e inclusivo. https://www.tiktok.com/@mscnoticias
La leyenda de Rómulo y Remo narra la historia de los fundadores míticos de Roma. Según el relato, Ascanio, hijo del héroe troyano Eneas, estableció la ciudad de Alba Longa a orillas del río Tíber. A lo largo de los años, sus descendientes reinaron sobre esta ciudad, hasta llegar a Numitor y su hermano Amulio. Amulio destronó a Numitor y, para evitar que tuviera descendencia que reclamara el trono, obligó a su hija, Rea Silvia, a convertirse en sacerdotisa de la diosa Vesta, asegurando así su virginidad. Sin embargo, Marte, el dios de la guerra, se unió a Rea Silvia, quien dio a luz a los gemelos Rómulo y Remo. Temiendo por su vida, Amulio ordenó que los recién nacidos fueran arrojados al Tíber en una canasta. La corriente los llevó hasta la zona de las siete colinas, cerca de la desembocadura del Tíber. Allí, una loba llamada Luperca los descubrió mientras bebía agua. Ella los llevó a su guarida en el Monte Palatino y los amamantó hasta que un pastor los encontró. El pastor y su esposa criaron a los mellizos, quienes al llegar a la adultez restauraron a Numitor en el trono de Alba Longa. Rómulo y Remo decidieron fundar una nueva ciudad como colonia de Alba Longa en el lugar donde la loba los había protegido. Así nació Roma, con Rómulo y Remo como sus primeros reyes. El mito de la loba que amamantó a los gemelos ha sido objeto de diversas interpretaciones. Algunos creen que la loba fue en realidad una mujer que cuidó de ellos, ya que el término latino “lupa” también se usaba para referirse despectivamente a las prostitutas de la época. Este relato, cargado de simbolismo, es fundamental para entender el origen mítico de una de las civilizaciones más influyentes de la historia. https://www.tiktok.com/@mscnoticias