Por 6to. año consecutivo, Farmacia SAAS renovó convenio con Doctor Yaso para seguir impulsando la expansión de esta organización de payasos de hospital en el territorio nacional. El consecuente respaldo de la red ha permitido a esta ONG trabajar por los niños, niñas y adolescentes hospitalizados en 18 ciudades del país. Alego Comunicaciones, 07/02/2013.- Con narices
Solo Parejas (2009) Desesperados por salvar su matrimonio, una pareja convence a otras tres para ir en grupo a un retiro de parejas con problemas. Pero la “terapia obligatoria” traerá más que problemas. Director: Peter Billingsley Reparto: Vince Vaughn, Jason Bateman, Jon Favreau. No Me Quites a mi Novio (2011) En esta genial comedia romántica,
El 28 de agosto de 1859, el mundo fue testigo de un fenómeno celestial sin precedentes. Auroras boreales iluminaron cielos inusuales, desde Madrid hasta Santiago de Chile y más allá. Pero este espectáculo no fue solo una maravilla visual; fue el preludio de un evento cósmico que cambiaría la historia tal como la conocemos. Pocos días después, el renombrado astrónomo Richard Carrington presenció una explosión de luz blanca en la superficie del Sol desde su jardín en Londres. Dos enormes llamaradas despidieron una energía equivalente a más de diez mil millones de bombas atómicas. Esta observación, conocida como el “Evento Carrington”, marcó el inicio de la tormenta solar más violenta de los últimos 500 años. La gran eyección de masa coronal del año 1859 desencadenó el caos tecnológico en todo el mundo. Las líneas telegráficas cayeron, se quemaron y operadores resultaron heridos. La red de telégrafos colapsó durante 14 horas en Europa y Estados Unidos. Sin embargo, la sorpresa llegó cuando, debido a la sobrecarga eléctrica atmosférica, los telégrafos continuaron enviando mensajes de larga distancia sin necesidad de baterías. Este evento histórico resalta la vulnerabilidad de nuestra tecnología ante los caprichos del universo. El Evento Carrington nos recuerda la fragilidad de nuestra civilización en un cosmos que siempre está en movimiento. Desde entonces, los científicos han estudiado este suceso para comprender mejor las tormentas solares y desarrollar medidas de protección. En resumen, el Evento Carrington de 1859 no solo fue un espectáculo celestial, sino también un recordatorio de nuestra dependencia de la tecnología y nuestra conexión con el cosmos. Este episodio histórico sigue fascinando y sirve como un llamado de atención sobre los misterios y peligros del espacio exterior.