Luis Pérez Fernández – PRENSA ATLÉTICO VENEZUELA
La noche de este domingo era el momento ideal para seguir escribiendo historia, y ante Zamora FC sería el reto por la jornada número once del Torneo Clausura 2016. Con garra, juego predominante y el tanto de la joya atlética y Vinotinto, Yangel Herrera, se pudo sacar el triunfo (0-1) por primera vez en condición de visitante ante los ‘blanquinegros’.
Para este compromiso el técnico español, Álex Pallarés, cambió su acostumbrada disposición táctica del 4-1-4-1 al 4-2-3-1, teniendo como único punta a Daniel “Cafú” Arismendi que regresó a la titularidad. Las dimensiones del estadio Agustín Tovar, también favorecieron a la elección del nuevo parado táctico.
Accidentando pero efectivo
El juez principal, Jesús Valenzuela, sonó el silbato para indicar el inicio del encuentro exactamente a las 19:33 horas. Durante los primeros minutos, el compromiso se tornó trabado en el sector medular del campo sin que ninguno de los dos clubes llegara con facilidad al arco rival. Poco juego era el que se mostraba en Barinas.
Las alarmas se encendieron en Atlético Venezuela, al 10’, cuando Daniel Valdés sufrió una fuerte contusión en la cabeza de forma involuntaria por parte de Edwin Peraza, en la acción de un tiro libre, que lo dejó inconsciente por algunos minutos, y que más tarde (27’) no pudo continuar en el arco siendo Wilver Jiménez su sustituto.
Con el pasar de los minutos el peligro fue tomando protagonismo y el cuadro local dio el primer aviso de gol, al 13’: César Martínez realizó un pase peligroso a los pies de Erickson Gallardo, quien logró sacar un disparo que pasa fuera del arco defendido por el meta tachirense Daniel Valdés. Atlético Venezuela no lograba conseguir comodidad en el campo y por ende su característico juego no relucía, sin embargo el orden y la tenencia de balón era continua.
Al 30’, el cuadro zamorano nuevamente advirtió al conjunto azul y rojo, cunado César Martínez nuevamente se conectó con Gallardo, siendo este último el encargado de disparar desviado por el arco nacional. Seis minuto después, al 36’, Atlético Venezuela comenzó demostrar en ataque al momento en el Jackson Muñoz tomó un balón rifado y disparó de forma potente para que finalmente Luis Curiel lo rechazara.
Los nacionales aprovecharon el buen momento que tomaron y al 38’, el juvenil e internacional Vinotinto, Yangel Herrera, tomó un pase exacto dentro del área del volante Luis Martínez para posteriormente sacarse la marca de Ynmer González y definir como los grandes. El primer tanto del juvenil en el torneo. Con pocos destellos de peligro sin ser finalizados por Zamora, los de la capital se fueron arriba al entre tiempo.
El resultado fue el reflejo del partido
La etapa complementaria del encuentro dio inicio tal y como terminó la primera. Zamora buscando el empate, al minuto 50, César Martínez disparó el esférico por un lado del arco defendido por Wilver Jiménez, luego de un tiro de esquina efectuado por José Pinto. Atlético también buscaba ampliar el marcador, y al 54’, el capitán Jonnathan España envió un preciso pase a Daniel Arismendi que con fuerza saca un zapatazo que tapa en gran forma el guardameta Curiel.
Era de ida y vuelta el encuentro. Al 72’José Pinto, luego de sacarse a varios jugadores nacionales, hizo alianza con el recién ingresado Ricardo Clarke quien disparó de manera frontal a las manos de Jiménez. Dos minutos más tarde (74’), en un contragolpe, Joel Infante se asoció con Jackson Muñoz para sacar un disparo desde fuera del área que nuevamente tapa el meta local.
Más allá del gol de Herrera, que les estaba dando la victoria, Muñoz era uno de los mejor por los nacionales. Al 80’, aplicando el zapatazo, Jackson Muñoz envía el balón a las manos de Curiel. Cerrando el partido (90+1), Cristian González logró incomodar a Anthony Blondell que no pudo sacar un remate certero.
Una nueva victoria nacional que los posiciona en la segunda casilla del Clausura con 20 unidades. Ahora, Atlético Venezuela toma carretera con el firme objetivo de sellar su pase hacia los Cuartos de Final de Copa Venezuela ante Mineros de Guayana en Puerto Ordaz, el próximo miércoles 24 de agosto.
Ficha técnica:
Zamora (0): 25. Luis Curiel, 20 Ronald Hernández*, 19. Edwin Peraza, 15. René Flores, 7. Ynmer González, 16. Ronaldo Lucena* (65’ 30. Yeferson Soteldo), 28. José Pinto*, 26. Erickson Gallardo, 18. Eduardo Sosa (58’ 21. Ricardo Clarke), 11. Sebastián Contreras (46’ 17. Anthony Blondell), 13. César Martínez. DT: Francesco Stifano.
Suplentes sin jugar: 1. Carlos Salazar, 4. Kevin De La Hoz*, 27. José Soto, 14. Christian Makouin.
(*) Juvenil.
Atlético Venezuela (1): 1. Daniel Valdés (27’ 12. Wilver Jiménez), 20. Francisco Parra, 2. Cristián González, 4. Jonnathan España (C), 30. Jhoel Salazar, 6. Yangel Herrera*, 23. Luis Martínez (53’ 19. Dimas Meza), 29. Josiel Núñez, 8. Jackson Muñoz, 76. Joel Infante, 15. Daniel Arismendi (75’ 7. Jairo Otero). DT: Alex Pallarés.
Suplentes sin jugar: 3. Andrés Maldonado, 25. Simón Bolívar*, 26. Gleider Caro, 33. Jhonny González.
(*) Juvenil.
Gol: 38’ 0-1 Herrera (ATV).
Árbitros: Jesús Valenzuela como principal; Alberto Ponte y Dixon Alvarado como primer y segundo asistentes, respectivamente; como cuarto árbitro Adrián Gómez. Cuarteto del estado Portuguesa.
Amonestaciones: 26’ Valdés (ATV), 32’ Muñoz (ATV), 42’ Pinto (Zamora), 45’+8 Hernández (Zamora), 71’ Núñez (ATV), 85’ Soteldo (Zamora).
Expulsados: No hubo.
Estadio: Agustín Tovar “La Carolina”, Barinas.
PRENSA – ATLÉTICO VENEZUELA CF
Fotografías: Alex Useche
El 28 de agosto de 1859, el mundo fue testigo de un fenómeno celestial sin precedentes. Auroras boreales iluminaron cielos inusuales, desde Madrid hasta Santiago de Chile y más allá. Pero este espectáculo no fue solo una maravilla visual; fue el preludio de un evento cósmico que cambiaría la historia tal como la conocemos. Pocos días después, el renombrado astrónomo Richard Carrington presenció una explosión de luz blanca en la superficie del Sol desde su jardín en Londres. Dos enormes llamaradas despidieron una energía equivalente a más de diez mil millones de bombas atómicas. Esta observación, conocida como el “Evento Carrington”, marcó el inicio de la tormenta solar más violenta de los últimos 500 años. La gran eyección de masa coronal del año 1859 desencadenó el caos tecnológico en todo el mundo. Las líneas telegráficas cayeron, se quemaron y operadores resultaron heridos. La red de telégrafos colapsó durante 14 horas en Europa y Estados Unidos. Sin embargo, la sorpresa llegó cuando, debido a la sobrecarga eléctrica atmosférica, los telégrafos continuaron enviando mensajes de larga distancia sin necesidad de baterías. Este evento histórico resalta la vulnerabilidad de nuestra tecnología ante los caprichos del universo. El Evento Carrington nos recuerda la fragilidad de nuestra civilización en un cosmos que siempre está en movimiento. Desde entonces, los científicos han estudiado este suceso para comprender mejor las tormentas solares y desarrollar medidas de protección. En resumen, el Evento Carrington de 1859 no solo fue un espectáculo celestial, sino también un recordatorio de nuestra dependencia de la tecnología y nuestra conexión con el cosmos. Este episodio histórico sigue fascinando y sirve como un llamado de atención sobre los misterios y peligros del espacio exterior.
El Domingo de Ramos es el día que marca el inicio de la Semana Santa en la tradición cristiana, conmemorando la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. Este día está lleno de simbolismo y significado religioso para los cristianos, pero en términos de “misterios”, podrían interpretarse algunos aspectos simbólicos o teológicos: La entrada triunfal de Jesús: Este evento, mencionado en los evangelios, es la base del Domingo de Ramos. Jesús entra en Jerusalén montado en un burro, mientras la multitud lo aclama y lo saluda con ramas de palma y ropas extendidas en su camino. El misterio aquí radica en la comprensión del significado de esta entrada en el contexto de la misión de Jesús y su relación con el reino de Dios. El cambio de actitud de la multitud: Es intrigante cómo la multitud que aclama a Jesús en su entrada triunfal el Domingo de Ramos luego se convierte en la misma multitud que lo rechaza y pide su crucifixión pocos días después. Este cambio repentino de actitud puede ser objeto de reflexión sobre la naturaleza humana y la fragilidad de las lealtades populares. El simbolismo de las palmas y las ramas: En muchas tradiciones cristianas, se llevan palmas y ramas durante las celebraciones del Domingo de Ramos como símbolo de victoria y triunfo. Estos elementos pueden representar la victoria espiritual sobre el pecado y la muerte que Jesús trae consigo, pero también pueden ser interpretados como un recordatorio de la naturaleza efímera de los triunfos terrenales. El comienzo de la Semana Santa: El Domingo de Ramos marca el inicio de la Semana Santa, un período de intensa reflexión y conmemoración para los cristianos. Este tiempo está lleno de rituales y tradiciones que recuerdan los eventos finales de la vida de Jesús, desde la Última Cena hasta su crucifixión y resurrección. Los misterios aquí son los propios misterios de la fe cristiana: la pasión, muerte y resurrección de Jesús, y su significado para la salvación de la humanidad. En resumen, el Domingo de Ramos está envuelto en una serie de misterios religiosos y simbolismos que invitan a la reflexión y la contemplación sobre la fe cristiana y el significado de la vida y la obra de Jesucristo. https://www.tiktok.com/@mscnoticias