Históricamente, los videojuegos operaban bajo un modelo económico sencillo: pagar una vez y jugar para siempre. Sin embargo, la industria ha evolucionado hacia ecosistemas free-to-play, donde los jugadores acceden gratuitamente pero son incentivados a gastar en extras para acelerar el progreso, obtener ventajas o mejorar la experiencia de juego. Entre estas prácticas destacan las loot boxes (cajas de botín), las apuestas por skins y otras microtransacciones, que han generado controversia al difuminar la línea entre entretenimiento y apuestas.
Las loot boxes funcionan de la siguiente manera: el jugador invierte dinero para adquirir una caja sin conocer su contenido, el cual es aleatorio, asemejándose a un juego de azar. Las recompensas más raras y deseadas son deliberadamente escasas, fomentando el gasto repetitivo en busca de obtenerlas.
Esta dinámica de suspenso y recompensa intermitente puede promover comportamientos adictivos, especialmente entre los jóvenes. La accesibilidad de los dispositivos móviles y la falta de controles efectivos de verificación de edad en muchas plataformas agravan el problema. Mientras los casinos están sujetos a regulaciones estrictas, muchos videojuegos operan en una zona gris legal, exponiendo a los jugadores jóvenes al riesgo de gastos compulsivos y posibles pérdidas financieras significativas, a menudo sin el conocimiento de sus tutores.
Un informe publicado en The Lancet Public Health advierte que aproximadamente 80 millones de adultos en todo el mundo sufren de adicción al juego. La democratización del acceso a juegos de azar, facilitada por la tecnología e internet, ha ampliado esta problemática a nivel global. Actividades permitidas en el 80% de los países y la creciente participación de adultos y adolescentes en apuestas resaltan la gravedad de la situación. Los expertos instan a implementar regulaciones más estrictas y campañas de concienciación para mitigar los daños asociados, que incluyen problemas financieros, altos riesgos de suicidio, violencia doméstica y trastornos psiquiátricos. Los menores y aficionados al deporte están particularmente expuestos, y la normalización del juego complica su prevención.
Además, un estudio reciente revela que más del 40% de los jóvenes entre 15 y 17 años ha participado en plataformas de apuestas en línea, a pesar de las restricciones legales. La facilidad de acceso y la falta de mecanismos efectivos de verificación de edad permiten que adolescentes ingresen a estas plataformas, incrementando el riesgo de desarrollar problemas psicológicos, financieros y una disminución en el rendimiento académico. Expertos y organizaciones abogan por medidas más estrictas y programas educativos para abordar estos riesgos.
La normalización de las apuestas y las microtransacciones en los videojuegos representan una amenaza creciente para la salud financiera y mental de los jóvenes. Es imperativo que tanto las autoridades como la industria del videojuego implementen regulaciones más estrictas y promuevan prácticas responsables para proteger a esta población vulnerable.
La reciente actualización del Ordo Exsequiarum Romani Pontificis refuerza la fe en Cristo resucitado y optimiza los rituales tras el fallecimiento de un Pontífice. El Vaticano presentó en noviembre de 2024 una edición revisada del Ordo Exsequiarum Romani Pontificis, el documento que regula el rito fúnebre de un Papa. Con esta modificación, se busca simplificar ciertos pasajes de la ceremonia y expresar con mayor claridad la esperanza cristiana en la resurrección. Entre los cambios más destacados, desaparece el tradicional golpe de martillo de plata por parte del camarlengo, quien dejará de llamar al Pontífice por su nombre de bautismo. En su lugar, la confirmación del fallecimiento se hará en la capilla privada del Palacio Apostólico. Asimismo, el cuerpo del Papa ya no se encierra en tres ataúdes (ciprés, plomo y roble), sino en un único ataúd de madera con interior de zinc. Se elimina también el velatorio privado en el palacio, de modo que el féretro será trasladado directamente a la Basílica de San Pedro, donde permanecerá en un catafalco abierto, sin mostrar el báculo papal. La misa exequial, presidida por el Decano del Colegio Cardenalicio, tendrá lugar en la Plaza de San Pedro, usando expresiones sencillas como “Obispo de Roma” o “Pastor” en lugar de títulos ligados al poder temporal. Al concluir, el féretro se depositará en su lugar de sepultura; aunque la tradición marca las grutas vaticanas, Francisco expresó su deseo de descansar en la Basílica de Santa María la Mayor. Durante la Sede Vacante, el camarlengo asume la administración temporal de la Iglesia hasta el cónclave en la Capilla Sixtina, donde los cardenales votan en secreto. El humo gris anuncia el empate, mientras que la fumata blanca señala la elección de un nuevo Papa, anunciado luego con el “Habemus Papam” desde el balcón central de San Pedro. Finalmente, el nuevo Pontífice se distingue por tres símbolos: la sotana blanca, la férula papal y el anillo del pescador, emblemas que reflejan su autoridad y misión pastoral. Fuentes: Vatican News. https://www.tiktok.com/@mscnoticias?lang=es
Con más de 13.000 años extinto, el lobo gigante renace en laboratorio como el primer caso exitoso de desextinción, gracias a la edición genética avanzada de Colossal Biosciences. Colossal Biosciences ha alcanzado un hito sin precedentes al presentar tres cachorros que combinan el ADN del lobo gris moderno con variantes genéticas del lobo gigante, especie desaparecida hace más de 13 000 años. Tras recuperar ADN fósil en 2021, el equipo identificó 20 genes clave asociados a mayor tamaño, densidad de pelaje y robustez ósea. Utilizando CRISPR, editaron células de lobo gris para crear embriones implantados en madres sustitutas caninas, dando lugar a Rómulo, Remo y Khaleesi, dos machos de seis meses y una hembra de dos meses, respectivamente. La directora científica de Colossal, Beth Shapiro, calificó a estas crías como “el primer caso de éxito de desextinción. Estamos creando copias funcionales de algo que solía estar vivo”, declaró en una reciente entrevista. Aunque los ejemplares permanecerán en cautiverio, este avance tecnológico podría aplicarse para proteger especies aún vivas, como el lobo rojo, en peligro crítico y limitado a Carolina del Norte. Este proyecto no solo desafía los límites de la biología sintética, sino que también plantea preguntas éticas sobre el bienestar animal y la conservación. Mientras algunos expertos abogan por protocolos rigurosos y marcos regulatorios que garanticen la responsabilidad ecológica, otros ven en la desextinción una herramienta para restaurar dinámicas de ecosistemas perdidos. De prosperar, la reintroducción de estos lobos podría revitalizar hábitats y equilibrar poblaciones de presas. Sin embargo, su éxito dependerá de evaluaciones de comportamiento en semilibertad y de la capacidad de estos animales para adaptarse a entornos naturales. Fuentes consultadas: Colossal Biosciences (2025). Press Release: First Giant Wolf Cubs. https://www.tiktok.com/@mscnoticias?lang=es