Muchos sitios webs requieren una cuenta de email para registrarse, la mayoría de los usuarios simplemente ingresan su cuenta principal. ¿Para qué se necesita más de una? Cuando se hace un registro en un nuevo servicio, generalmente se acepta transferir la información de contacto de un servicio a otro con fines de marketing. ¿Qué se puede hacer?
Estrategia 1: Usar una dirección de email descartable – para temas no importantes.
Algunos servicios de email descartables permiten usar un email temporario que se autodestruye en un lapso que se puede programar. Esto es útil para servicios que, de un solo uso, por ejemplo si se quiere acceder a contenido restringido, pero no se quiere correr el riesgo recibir cientos de correos de marketing o spam. En este caso, ESET hace una advertencia: Nunca usar este tipo de servicios de emails descartables para comunicaciones que tengan información sensible.
Estrategia 2: Crear una dirección de email alternativa, o secundaria para logins y newsletters que sean importantes.
Para los contactos bancarios, del gobierno, y otros importantes, puede usarse un servicio como ProtonMail, que ofrece encriptado extremo-a-extremo. No utilizar una cuenta de mail primaria para nada que no sea contactos familiares y de amigos. Esto ayuda a mantener la bandeja de entrada organizada, libre de spam, y protegida de fugas de datos si el servicio de mail sufre un ataque.
Alternativamente, también puede usar una función como Ocultar mi Email de Apple para suscribirte a un servicio sin revelar el correo electrónico real. Apple crea una dirección única que enmascara la dirección real al servicio. Todos los correos electrónicos se reenviarán automáticamente desde la cuenta enmascarada a la real. Si bien Android aún no ofrece una característica similar, hay algunas alternativas, como Firefox Relay.
Al igual que con las direcciones de mail, el número de teléfono también es requerido para registrarse a varios sitios webs, para recibir contraseñas temporales que confirman la identidad, o incluso para que vendedores entreguen los datos de contacto a un servicio de entregas físicas. El número de teléfono está en todos lados, por lo que no es de extrañarse que muchos de usuarios reciban mensajes de texto o WhatsApp como intento de estafas.
Estrategia 3: Conseguir una tarjeta SIM prepaga
Generalmente, es una tarjeta no muy cara que, en algunos países, no requieren de identificación del usuario. Si es el caso, se puede usar ese número para todo registro online que se necesite: Se puede asociar a las cuentas de redes sociales, o usarse para hacer un seguimiento envíos de correo o delivery, y usarlo para mantener el anonimato. Entre tanto, el número real solo se debería compartir con fuentes confiables, amigos, familia, instituciones financieras, el gobierno. Si se utiliza un número desechable y se recibe una llamada ya se puede asumir tranquilamente que se trata de una estafa y, lo más probable, que el sitio web en el que se realizó algún registro sufrió el robo de información.
Tarjetas bancarias de un solo uso
Comprar online puede ser muy conveniente. Solo se necesita ingresar a un sitio web, elegir qué se quiere y, a menudo, utiliza los datos bancarios que ya están registrados por alguna compra anterior. A menos que el sitio haya sufrido un robo de información que comprometa los datos de la tarjeta y se sea víctima de una estafa de ingeniería social.
Estrategia 4: Utilizar tarjetas virtuales de un solo uso, o tarjetas prepagas
Muchos bancos tradicionales, u online, y billeteras virtuales, que usan aplicaciones móviles, ofrecen tarjetas virtuales como opcionales a la tarjeta física. En muchos de estos bancos también se ofrecen tarjetas de un solo uso que se conectan a una tarjeta real. Una vez que se compra con esa tarjeta, el sistema del banco detecta el movimiento y destruye los detalles de esa tarjeta, generando una nueva para la próxima compra. Como esas tarjetas tienen datos aleatorios, los hackers no pueden conseguir la información real. Además, en caso de reembolsos, los vendedores pueden devolver cualquier importe con la misma tarjeta de un solo uso a la cuenta original.
Estrategia 5: Utilizar los códigos 2FA generados por las aplicaciones.
La mayoría de los servicios permiten -y recomiendan- el uso de la autenticación de dos factores (2FA, sus siglas en inglés): además de ingresar una contraseña, puede requerirse un paso más de autenticación. Si alguien roba una contraseña, de este modo, no podrá ingresas a la cuenta sin el segundo código de identificación.
Frecuentemente, el segundo factor de identificación es un mensaje SMS al teléfono móvil con una contraseña o código temporal. Solo se necesita tipearlo dónde lo requiera para probar la identidad. Otro modo -y mejor- se basa en aplicaciones de autenticación como el Microsoft Authenticator. En las configuraciones de seguridad la mayoría de los sitios web ofrecen la posibilidad de generar un código QR o alfanumérico que se puede agregar a la aplicación de autenticación que generara un código temporal para autenticarse.
El Día Internacional de las Personas con Discapacidad se celebra el 3 de diciembre de cada año. Esta fecha fue establecida por las Naciones Unidas con el objetivo de promover la inclusión y la igualdad de oportunidades para las personas con discapacidad en todos los aspectos de la sociedad. La celebración de este día busca concientizar a la población sobre los desafíos que enfrentan las personas con discapacidad, así como promover la comprensión de sus derechos y la necesidad de garantizar un acceso equitativo a la educación, el empleo, la atención médica y la participación plena en la vida social y cultural. La Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2006, también desempeña un papel importante en la promoción de los derechos y la inclusión de las personas con discapacidad a nivel internacional. Este tratado reconoce que las personas con discapacidad tienen los mismos derechos que cualquier otra persona y destaca la importancia de eliminar las barreras que limitan su participación plena en la sociedad.
El Día de los Muertos es una festividad tradicional mexicana que tiene raíces profundas en la cultura indígena precolombina de México, especialmente entre los pueblos aztecas, mayas, purepechas y totonacas. Esta celebración se lleva a cabo el 1 y 2 de noviembre, coincidiendo con el Día de Todos los Santos y el Día de los Muertos en el calendario católico, lo que es una muestra de la fusión de las tradiciones indígenas y europeas después de la conquista española en el siglo XVI. Las razones por las cuales se celebra el Día de los Muertos en México son variadas: Conexión con las creencias indígenas: Los pueblos indígenas de México tenían una profunda conexión con la muerte y creían que la vida después de la muerte era una parte natural del ciclo de la vida. Celebraban a sus muertos a través de rituales y ofrendas mucho antes de la llegada de los españoles. Sincretismo religioso: Después de la conquista española, la religión católica se combinó con las creencias indígenas para dar lugar a esta festividad. Los colonizadores españoles intentaron reemplazar las creencias indígenas con las suyas, pero en lugar de erradicar las tradiciones preexistentes, se incorporaron elementos católicos en la celebración de los muertos. Homenaje a los seres queridos fallecidos: El Día de los Muertos es una forma de honrar y recordar a los seres queridos que han fallecido. Las familias crean altares o ofrendas que incluyen fotos, velas, flores, alimentos y objetos personales de los difuntos para recibir sus espíritus y celebrar su memoria. Celebración de la vida: Aunque pueda parecer paradójico, el Día de los Muertos no es una festividad triste, sino más bien una celebración de la vida. Se cree que durante estos días, los difuntos regresan a visitar a sus seres queridos, y se les recibe con música, baile y comida. Conservación de la identidad cultural: El Día de los Muertos es una de las festividades más importantes en la cultura mexicana, y su celebración contribuye a la preservación de las tradiciones y la identidad cultural del país. En resumen, el Día de los Muertos en México es una festividad arraigada en las creencias indígenas, el sincretismo religioso y la conexión con los seres queridos fallecidos. Es una celebración única que combina elementos de alegría, respeto y espiritualidad, y juega un papel importante en la cultura mexicana.