El tabaco es uno de los principales factores de riesgo para el cáncer de pulmón. Fumar tabaco, así como estar expuesto al humo de segunda mano, aumenta significativamente las posibilidades de desarrollar cáncer de pulmón.
El humo del tabaco contiene más de 7,000 sustancias químicas, muchas de las cuales son tóxicas y carcinógenas, lo que significa que pueden causar cáncer. Entre estas sustancias se encuentran el alquitrán, el benzopireno, el formaldehído, el arsénico, el cadmio, el níquel y el polonio-210. Estas sustancias dañinas se inhalan directamente a los pulmones al fumar y pueden causar daños en el ADN de las células pulmonares, lo que aumenta el riesgo de desarrollar cáncer.
Se estima que aproximadamente el 85% de los casos de cáncer de pulmón están relacionados con el tabaquismo. Los fumadores tienen un riesgo de desarrollar cáncer de pulmón hasta 25 veces mayor que los no fumadores. Además, el riesgo aumenta con la cantidad de cigarrillos fumados al día y la duración del hábito de fumar. Incluso fumar solo unos pocos cigarrillos al día o fumar de forma intermitente puede aumentar el riesgo de cáncer de pulmón.
Además del cáncer de pulmón, fumar tabaco también se asocia con un mayor riesgo de desarrollar otros tipos de cáncer, como el cáncer de boca, garganta, esófago, páncreas, vejiga y riñón, entre otros. También puede aumentar el riesgo de enfermedades respiratorias, enfermedades del corazón, accidentes cerebrovasculares y otros problemas de salud.
La mejor manera de reducir el riesgo de cáncer de pulmón y otros problemas de salud relacionados con el tabaco es evitar fumar y evitar la exposición al humo de segunda mano. Además, dejar de fumar puede tener beneficios inmediatos para la salud, y cuanto antes se abandone el hábito, mayor será la reducción del riesgo. Existen varios recursos y tratamientos disponibles para ayudar a las personas a dejar de fumar, como terapias de reemplazo de nicotina, medicamentos recetados y programas de apoyo conductual.
La harina: Un ingrediente esencial con historia y versatilidad La harina, ese polvo fino conocido como “oro blanco”, es mucho más que un básico de cocina. Su historia moderna comienza en el siglo XIX con la harina de trigo blanco refinada, un proceso que elimina salvado y germen, reduciendo nutrientes esenciales. Por ello, la harina integral se alza como la opción más saludable, conservando las bondades del grano original. No solo el trigo protagoniza este ingrediente: maíz, arroz, centeno, avena, legumbres e incluso nueces dan vida a variedades únicas. Esta diversidad permite usos sorprendentes, desde espesar sopas y salsas hasta nutrir levaduras en la fermentación de cerveza. En la cocina, empanar pollo o pescado es un arte que depende de su textura, mientras que en panadería, la calidad del gluten y la absorción de agua son clave para un pan perfecto. Almacenarla es sencillo: en un lugar fresco y seco, puede durar meses o años sin perder propiedades. Pero la harina trasciende la despensa. En Wittenburg, Alemania, el Museo Mundial de la Harina, inaugurado en 2008, exhibe 3,500 sacos de más de 140 países, celebrando su legado global. Este espacio revela cómo un ingrediente cotidiano conecta culturas. Aunque refinada y enriquecida sea la más común en supermercados, la harina integral gana terreno por su valor nutricional, según estudios de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que destacan su aporte de fibra y vitaminas. Su versatilidad y riqueza histórica la convierten en un tesoro culinario, presente en cada rincón de Latinoamérica y el mundo. La próxima vez que amases o frías, recuerda: ese polvo blanco guarda secretos de siglos y une tradición con innovación. Un ingrediente humilde, pero indispensable. Fuentes: OMS – Nutrición y Salud. https://www.tiktok.com/@mscnoticias?lang=es
Alivio global: NASA asegura que YR4 pasará a distancia segura La NASA ha confirmado que el asteroide YR4 no representa peligro para la Tierra en el futuro próximo, tras una serie de estudios detallados que despejan cualquier posibilidad de impacto. Esta noticia trae tranquilidad después de semanas de incertidumbre y especulaciones sobre su trayectoria. Los resultados fueron obtenidos mediante telescopios de alta precisión y modelos avanzados de predicción, permitiendo a los expertos calcular con exactitud el recorrido del asteroide. Con base en estos datos, se determinó que el YR4 pasará a una distancia segura de nuestro planeta, disipando temores de una posible colisión en los próximos años. Los científicos destacaron que las observaciones más recientes descartan cualquier riesgo, subrayando la relevancia de los sistemas de monitoreo espacial en la identificación de objetos cercanos a la Tierra. Estas tecnologías juegan un papel crucial en la detección temprana de amenazas y en el desarrollo de estrategias de defensa planetaria. La comunidad científica enfatiza la necesidad de seguir fortaleciendo las capacidades de vigilancia espacial para anticiparse a eventuales riesgos futuros. La colaboración internacional y el avance en tecnología aeroespacial seguirán siendo clave para la protección de la Tierra frente a cuerpos celestes potencialmente peligrosos. Fuentes: NASA (Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio) Observatorios astronómicos especializados https://www.tiktok.com/@mscnoticias?lang=es