La hipertensión, ese enemigo silencioso que acecha a millones de personas en todo el mundo. ¿Sabías que según la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor de 1.130 millones de personas sufren de esta enfermedad crónica? ¡Increíble, pero cierto! Y lo peor es que es responsable de aproximadamente el 13% de las muertes por enfermedades no transmisibles a escala global. ¿Te imaginas la magnitud del problema?
Si crees que esto no te afecta, ¡piénsalo de nuevo! En Latinoamérica, la prevalencia de la hipertensión alcanza un alarmante 42%. Pero espera, eso no es todo. En Venezuela, según los datos revelados por el Estudio Venezolano de Salud Cardiometabólica (EVESCAM) en 2017, ¡la cifra asciende al 47.6%! Es momento de tomar acción y enfrentar este desafío de frente.
Entendamos un poco más sobre la hipertensión arterial. La presión arterial es esa fuerza que la sangre ejerce contra las paredes de nuestras arterias. ¿Te has preguntado cómo se mide? Bueno, los médicos registran dos cifras: la presión arterial sistólica (PAS), que refleja la fuerza cuando el corazón se contrae, y la presión arterial diastólica (PAD), que es responsable de la irrigación miocárdica durante la relajación del corazón. El valor normal es de 130/80 mmHg, pero cuando las cifras superan los 140/90 mmHg, estamos frente a la hipertensión.
Pero, ¿cómo se desarrolla esta condición tan temida? La hipertensión es el resultado de una combinación de factores, como antecedentes familiares, sobrepeso, obesidad, diabetes, sedentarismo y hábitos poco saludables como el consumo excesivo de sal, alcohol y tabaco. ¡Vaya lista! Y no olvidemos el estrés crónico, que puede agravar aún más la situación.
Lo curioso es que la mayoría de las personas que padecen hipertensión no presentan síntomas evidentes. Sin embargo, si no se trata, puede causar complicaciones graves y dañar órganos vitales. ¿Te imaginas sufrir enfermedades del corazón como cardiopatía hipertensiva, angina inestable o incluso un infarto agudo de miocardio? ¡Es aterrador! También existe el riesgo de accidentes cerebrovasculares, como ictus isquémicos y hemorrágicos, que pueden dejar secuelas neurocognitivas a largo plazo. Además, la enfermedad renal crónica, la retinopatía hipertensiva y, en casos extremos, incluso la muerte pueden ser consecuencias de no controlar adecuadamente esta condición.
El Fascinante Origen del Día de las Bromas de Abril El Día de las Bromas de Abril, conocido también como “April Fools’ Day”, tiene raíces históricas sorprendentes. A mediados del siglo XVI, el Año Nuevo se celebraba entre el 25 de marzo y el 1 de abril. Todo cambió cuando un decreto del rey de Francia, conocido como el Edicto de Roussillon, trasladó esta festividad al 1 de enero. Sin embargo, la noticia no llegó a todos de inmediato. Muchas regiones francesas y colonias protestantes en América, por desconocimiento o resistencia, siguieron festejando en abril, lo que les ganó el apodo de “tontos”. Con el tiempo, esta confusión dio paso a una tradición única. Los norteamericanos, ingeniosos y burlones, transformaron el 1 de abril en el Día de las Bromas, una fecha para sorprender con travesuras y regalos divertidos. Lo que comenzó como un error histórico se convirtió en una celebración global, donde la creatividad y el humor son protagonistas. A pesar de su origen europeo, el Día de las Bromas trasciende fronteras. Hoy, empresas, medios y personas aprovechan esta fecha para conectar con audiencias mediante bromas ingeniosas, fortaleciendo lazos sociales y culturales. Es un recordatorio de cómo un malentendido puede evolucionar en algo positivo y entretenido. Fuentes adicionales: “The History of April Fools’ Day” (History.com) “April Fools’ Day: Origins and Traditions” (National Geographic) https://www.tiktok.com/@mscnoticias?lang=es
Con más de 13.000 años extinto, el lobo gigante renace en laboratorio como el primer caso exitoso de desextinción, gracias a la edición genética avanzada de Colossal Biosciences. Colossal Biosciences ha alcanzado un hito sin precedentes al presentar tres cachorros que combinan el ADN del lobo gris moderno con variantes genéticas del lobo gigante, especie desaparecida hace más de 13 000 años. Tras recuperar ADN fósil en 2021, el equipo identificó 20 genes clave asociados a mayor tamaño, densidad de pelaje y robustez ósea. Utilizando CRISPR, editaron células de lobo gris para crear embriones implantados en madres sustitutas caninas, dando lugar a Rómulo, Remo y Khaleesi, dos machos de seis meses y una hembra de dos meses, respectivamente. La directora científica de Colossal, Beth Shapiro, calificó a estas crías como “el primer caso de éxito de desextinción. Estamos creando copias funcionales de algo que solía estar vivo”, declaró en una reciente entrevista. Aunque los ejemplares permanecerán en cautiverio, este avance tecnológico podría aplicarse para proteger especies aún vivas, como el lobo rojo, en peligro crítico y limitado a Carolina del Norte. Este proyecto no solo desafía los límites de la biología sintética, sino que también plantea preguntas éticas sobre el bienestar animal y la conservación. Mientras algunos expertos abogan por protocolos rigurosos y marcos regulatorios que garanticen la responsabilidad ecológica, otros ven en la desextinción una herramienta para restaurar dinámicas de ecosistemas perdidos. De prosperar, la reintroducción de estos lobos podría revitalizar hábitats y equilibrar poblaciones de presas. Sin embargo, su éxito dependerá de evaluaciones de comportamiento en semilibertad y de la capacidad de estos animales para adaptarse a entornos naturales. Fuentes consultadas: Colossal Biosciences (2025). Press Release: First Giant Wolf Cubs. https://www.tiktok.com/@mscnoticias?lang=es