Para la nutricionista de Gold´s Gym Amelia de la Peña hay que lograr “engañar al cerebro” con las porciones de comida en Navidad y Año Nuevo y además garantizar el ejercicio físico.
Para quienes vienen cuidando su alimentación durante todo el año, la llegada de la Navidad no puede significar que se admiten todos los excesos en comidas y bebidas los días 24, 25 y 31 de diciembre, porque ello sería “meter la pata”, según advierte la nutricionista de la cadena de bienestar Gold´s Gym, Amelia de la Peña.
“Lo importante estos días en los que compartes con familia, amigos y en el trabajo, es controlar lo que comes y las cantidades, evitando los excesos pero además haciendo ejercicios diarios, aunque sea 45 minutos de caminata, porque ello permitirá que el metabolismo trabaje y evitará que los excesos de calorías se conviertan en grasa corporal”.
Para la especialista en nutrición se trata de aprender a comer y no de quitarse los alimentos. Precisó además que los excesos de la temporada decembrina afectan tanto a niños, adolescentes como adultos.
“Quizás quien es más vulnerable es el adulto pues además de la comida toma alcohol. Nuestro plato navideño es alto en carbohidratos procesados y grasas saturadas. Una hallaca puede tener entre 500 y 600 calorías, un plato navideño puede llegar con todos sus componentes a 2000 calorías que es el requerimiento de una mujer adulta por ejemplo. Y si a eso le sumas, las bebidas alcohólicas, pues los excesos son mayores.”
Recomendaciones para evitar excesos por comida
De la Peña señala que el secreto está en controlar las cantidades. Como recomendación expone que es necesario cumplir con las comidas del día y no dejar de hacerlas para comer en exceso en la cena de navidad o año nuevo.
“Es un error comer libre en la noche, porque luego te vas a acostar y ese exceso se convertirá en grasa corporal. Sírvete en un plato mediano 2 cucharadas de ensalada, no coloques bandejas de comida en la mesa, sirve las porciones en la cocina. En tu plato coloca también un bollito pequeño o media hallaca, 2 o 3 rebanas finas de pan de jamón, y tu plato tendrá todo, pero en cantidades controladas. Igual con los dulces, si tienes tres, sirve un poquito de cada uno y no repitas. Si quieres repetir algo que sea la proteína, un poquito más de pernil o pavo.”
Sugiere además en el caso de las bebidas, llenar el vaso con hielo y colocar sólo dos deditos de ponche crema, no superar las 2 copas de vino e hidratarse mucho.
La recomendación con la que cierra De la Peña, es hacer ejercicio. “Muchos de mis pacientes no saldrán de Caracas y van a seguir entrenado en el gimnasio. Eso es importante, aunque sea caminar unos 45 minutos todos los días, evitará la acumulación de grasa corporal por excesos de Navidad”.
La Organización de las Naciones Unidas proclama el 18 de septiembre como Día Internacional de la Igualdad Salarial, con la finalidad de resaltar la importancia de equipar la igualdad salarial por un trabajo de igual valor. La igualdad salarial o igualdad de remuneración se refiere al derecho de hombres y mujeres a recibir una remuneración equitativa por trabajos de igual valor. Este concepto considera factores como competencias, condiciones laborales, calificaciones y niveles de responsabilidad en el desempeño del puesto. Además, la igualdad salarial refuerza los derechos humanos y la igualdad de género, y cuenta con el respaldo de actores clave como la comunidad internacional, la sociedad civil, agencias de ONU Mujeres, los Estados Miembros y la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Como antecedente histórico, tras la Segunda Guerra Mundial, en 1951 se estableció el Convenio sobre Igualdad de Remuneración, reconocido como el primer instrumento internacional que impulsó la incorporación masiva de las mujeres al mundo laboral, ocupando posiciones en la primera línea de producción en varios países. La creación de este convenio surgió como respuesta a la desigualdad salarial, vista como una clara forma de discriminación laboral. Este hito marcó el comienzo de un avance significativo hacia una mayor igualdad de género en el mercado laboral, estableciendo las bases para eliminar brechas económicas y promover un entorno laboral más justo e inclusivo. https://www.tiktok.com/@mscnoticias
La leyenda de Rómulo y Remo narra la historia de los fundadores míticos de Roma. Según el relato, Ascanio, hijo del héroe troyano Eneas, estableció la ciudad de Alba Longa a orillas del río Tíber. A lo largo de los años, sus descendientes reinaron sobre esta ciudad, hasta llegar a Numitor y su hermano Amulio. Amulio destronó a Numitor y, para evitar que tuviera descendencia que reclamara el trono, obligó a su hija, Rea Silvia, a convertirse en sacerdotisa de la diosa Vesta, asegurando así su virginidad. Sin embargo, Marte, el dios de la guerra, se unió a Rea Silvia, quien dio a luz a los gemelos Rómulo y Remo. Temiendo por su vida, Amulio ordenó que los recién nacidos fueran arrojados al Tíber en una canasta. La corriente los llevó hasta la zona de las siete colinas, cerca de la desembocadura del Tíber. Allí, una loba llamada Luperca los descubrió mientras bebía agua. Ella los llevó a su guarida en el Monte Palatino y los amamantó hasta que un pastor los encontró. El pastor y su esposa criaron a los mellizos, quienes al llegar a la adultez restauraron a Numitor en el trono de Alba Longa. Rómulo y Remo decidieron fundar una nueva ciudad como colonia de Alba Longa en el lugar donde la loba los había protegido. Así nació Roma, con Rómulo y Remo como sus primeros reyes. El mito de la loba que amamantó a los gemelos ha sido objeto de diversas interpretaciones. Algunos creen que la loba fue en realidad una mujer que cuidó de ellos, ya que el término latino “lupa” también se usaba para referirse despectivamente a las prostitutas de la época. Este relato, cargado de simbolismo, es fundamental para entender el origen mítico de una de las civilizaciones más influyentes de la historia. https://www.tiktok.com/@mscnoticias