El grupo de teatro estable de la Universidad Metropolitana prepara una serie de encuentros que repasan los momentos más icónicos de esta compañía y su impacto en las artes escénicas venezolanas
En la Venezuela actual, es raro encontrar una agrupación que haya logrado resistir de manera exitosa los embates del tiempo y el país. Es el caso de la agrupación teatral Thespis, compañía estable de la Universidad Metropolitana, que ha decidido celebrar sus 40 años de trayectoria ininterrumpida con una serie de encuentros y charlas digitales.
La programación consta de más de 15 eventos digitales que se realizarán vía Zoom, y que incluye charlas, entrevistas y lecturas dramatizadas a cargo de personalidades como el actor Carlos Abbatemarco, Rossana Hernández (actriz y directora actual de la agrupación), Elvis Chaveinte, Liz Quintero, Armando Yánez y Moisés Kaufman, un egresado excepcional que ha sabido labrarse un sólido camino como director escénico en Estados Unidos, y que ostenta el logro de ser el primer venezolano en ser reconocido en 2016 con la National Medal of Arts por el presidente Barack Obama.
Desde el lunes 18 hasta el viernes 22 de octubre, los ponentes se pasearán por el aporte dramático de Thespis al arte venezolano, partiendo desde temas como la musicalización de sus obras, el registro fotográfico que hay de las mismas, sus montajes más célebres y los retos que enfrenta en la actualidad.
El encuentro no solo servirá como un espacio de encuentro entre los miembros fundadores de Thespis y su generación de relevo, sino también para presentar dos piezas importantes para el legado de la compañía: el libro digital recopilatorio Cuatro décadas de búsqueda, compilado y editado por Abbatemarco, y un documental a cargo del reconocido periodista Nabor Zambrano.
El ciclo Cuatro Décadas de Búsqueda tendrá lugar desde el lunes 18 hasta el viernes 22 de octubre, desde las 12:00 hasta las 8:00 pm a través de Zoom. La participación es gratuita, con registro previo a través del correo [email protected].
Cada evento se subirá al canal de YouTube 40deThespis. Mayor información sobre el evento puede ser solicitada a través de @teatrothespis en Facebook, Twitter e Instagram.
El Día Mundial de la Leche se celebra para destacar la importancia de la leche y los productos lácteos en la alimentación humana, así como para crear conciencia sobre los beneficios nutricionales y económicos que aportan a las personas y a las comunidades. La fecha exacta del Día Mundial de la Leche puede variar en diferentes países, pero generalmente se celebra el 1 de junio. Fue establecido por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) con el objetivo de promover la importancia de los productos lácteos en la alimentación y resaltar el papel fundamental de los productores de leche. El Día Mundial de la Leche busca resaltar los siguientes aspectos: Nutrición: La leche es una fuente importante de nutrientes esenciales, como proteínas, vitaminas (especialmente vitamina D y calcio) y minerales. Contribuye al desarrollo y crecimiento adecuado, especialmente en los niños. Seguridad alimentaria: La producción de leche y productos lácteos es una parte vital de la cadena alimentaria global. Destacar su importancia ayuda a garantizar la seguridad y la calidad de los productos lácteos para los consumidores. Sostenibilidad: La producción de leche puede desempeñar un papel significativo en la economía rural y en la sostenibilidad ambiental. Promover la conciencia sobre estos aspectos puede ayudar a mejorar las prácticas agrícolas y la gestión de los recursos naturales. En resumen, el Día Mundial de la Leche se celebra para promover el consumo de leche y productos lácteos, resaltar su valor nutricional y económico, y reconocer la labor de los productores lácteos en todo el mundo.
La Vía Láctea recibe su nombre debido a su apariencia en el cielo nocturno. “Vía Láctea” proviene del latín y significa “camino lácteo” o “sendero de leche”. La denominación se debe a la apariencia de una banda de luz blanquecina que atraviesa el cielo y que se asemeja a un río de leche derramado. Esta banda de luz es la acumulación de innumerables estrellas y otros objetos celestes que forman parte de nuestra galaxia, la cual es conocida como la Vía Láctea. La Vía Láctea es una galaxia espiral en la que se encuentra nuestro sistema solar. Es una de las muchas galaxias que existen en el universo y se estima que contiene entre 200 mil millones y 400 mil millones de estrellas. Además de las estrellas, la Vía Láctea también alberga una gran cantidad de planetas, nebulosas, cúmulos estelares y otros objetos celestes. La apariencia característica de la Vía Láctea en el cielo nocturno se debe a la acumulación de estrellas y otros cuerpos celestes a lo largo del plano galáctico. Esta acumulación forma una banda de luz blanquecina que se extiende por todo el cielo y que ha sido observada por la humanidad durante miles de años. Desde la antigüedad, diferentes culturas han intentado interpretar esta banda de luz. Los antiguos griegos la consideraban como la leche derramada por la diosa Hera, mientras que en la mitología nórdica se creía que era el camino que llevaba al Valhalla. La denominación “Vía Láctea” se originó en la antigua Roma, donde se creía que era un sendero celestial creado por los dioses. Con el desarrollo de la astronomía moderna, se ha descubierto que la Vía Láctea es una galaxia en forma de disco, con un bulbo central y brazos espirales que se extienden desde el centro. Nuestro sistema solar se encuentra en uno de los brazos espirales, aproximadamente a unos 27,000 años luz del centro galáctico. Además de las estrellas visibles a simple vista, la Vía Láctea contiene una gran cantidad de materia oscura, que es una forma de materia invisible que solo se detecta a través de sus efectos gravitacionales. Se cree que la materia oscura desempeña un papel crucial en la formación y evolución de las galaxias. La Vía Láctea también ha sido objeto de estudio por parte de los astrónomos modernos para comprender mejor su estructura y composición. Se han realizado observaciones en diferentes longitudes de onda, desde la luz visible hasta las ondas de radio, para investigar la distribución de las estrellas, el gas interestelar y los campos magnéticos en nuestra galaxia. Además, las observaciones han revelado que la Vía Láctea está en constante interacción con otras galaxias vecinas. En el futuro, se espera que colisione con la galaxia de Andrómeda, otra galaxia espiral cercana, lo que resultará en la formación de una nueva galaxia gigante. En resumen, la Vía Láctea es nuestra galaxia, una inmensa estructura en forma de disco que alberga una gran cantidad de estrellas y otros objetos celestes. Su nombre, “Vía Láctea”, proviene de la apariencia lechosa que tiene en el cielo nocturno y ha sido objeto de fascinación y estudio a lo largo de la historia humana.