El jefe Recursos Humanos, Nairo Díaz, expresó que la empresa apoyó a las comunidades aledañas a sus tres plantas ubicadas en Lara y a sus colaboradores
Pese a las limitaciones impuestas por la pandemia de Covid-19 que obligaron a reducir, posponer y reprogramar muchas actividades, la marca Natulac a través de Industrias Maros C. A., ha mantenido sus proyectos e iniciativas de responsabilidad social, ayudando a más de 2 mil personas, a lo largo de este año.
Nairo Díaz, jefe de Recursos Humanos, señaló que la empresa apoyó a distintas comunidades cercanas a las tres plantas ubicadas en el estado Lara. “Ejemplo de ello es el asentamiento José Félix Ribas, a quienes donamos artículos de ferretería, para resolver su situación de suministro de agua. Esta acción benefició a más de 900 personas (150 familias). Asimismo, en ocasión del Día del Niño donamos productos para 150 infantes y sus familias”, precisó.
Dentro del programa de responsabilidad social para este período, también se mencionan donaciones de productos, cuyo fin es apoyar vendimias y rifas, para la adquisición de medicamentos y el pago de tratamientos a personas que necesitan una mano amiga.
Díaz señaló que también se colaboró con la Arquidiócesis de Barquisimeto, a propósito de la procesión de la Divina Pastora el 14 de enero. “Aunque este año la actividad estuvo muy limitada por la pandemia, apoyamos con donación de hidratación y néctares para más de 300 voluntarios miembros de la iglesia, quienes participaron en el desarrollo de la programación religiosa. A lo largo de estos meses, también atendimos otras zonas pastorales que realizaron encuentros de voluntarios, jóvenes y líderes; este tipo de apoyo es una tradición para Natulac”.
Así mismo, la marca estuvo presente con las asociaciones deportivas como Baloncesto de Lara, aportando hidratación de néctares durante sus entrenamientos. “También, colaboramos con la Fundación Lucianita Valeska, que consigue medicamentos para niños en situación crítica. Les donamos productos para unas 50 personas para apoyar su labor”, comentó.
Puertas adentro
Industrias Maros, C.A, también despliega esfuerzos para ayudar a sus más de 500 colaboradores. Entre las acciones destacan las entregas mensuales de productos de la marca, así como alimentos de la cesta básica. “La situación es muy compleja, pero apostamos a nuestra gente, porque son comprometidos, responsables y con un alto sentido de pertenencia con la marca”, aseveró.
Resaltó que la empresa prevé seguir desplegando acciones de apoyo social en lo que queda de año, en función de los requerimientos de las comunidades, sobre todo de las más cercanas.
El equipo de Industrias Maros, C. A. que ayuda a la gestión de las actividades de responsabilidad social es de unas 15 personas, “Pero se suman muchas más si se requiere. Esta es una empresa que está para ayudar a la gente. Sabemos que no podemos resolver la situación actual de las comunidades y de las familias, pero podemos hacer que sea más sostenible”, afirmó Díaz.
En una fusión de historia, espiritualidad y tradición, el Jueves Santo emerge como un día crucial en el calendario litúrgico cristiano. En los relatos bíblicos de San Lucas, San Juan, San Marcos y San Mateo, se encuentran los pilares que sustentan esta conmemoración. La última cena, un simbolismo tan profundo como la fe misma, donde Jesús compartió un momento trascendental con sus 12 discípulos. Esta cena, conocida también como la Santa Cena, resonó con la tradición judía al incluir el cordero pascual, trazando así un puente entre el Antiguo y el Nuevo Testamento. En un gesto de profunda humildad, el lavatorio de los pies se erige como un acto de amor y servicio. Jesús, en un acto conmovedor, lavó los pies de sus discípulos, desafiando así las barreras sociales y enseñando la esencia del verdadero liderazgo. La narrativa bíblica también nos transporta al huerto de Getsemaní, donde Jesús, en un momento de angustia, buscó fuerza en la oración antes de enfrentar su destino. Este episodio conmueve por su humanidad y su conexión con las luchas espirituales de la humanidad. El arresto de Jesús a manos de Judas Iscariote sella el dramatismo de este día, marcando el inicio de los eventos que llevarían a la crucifixión y resurrección, pilares fundamentales de la fe cristiana. El Jueves Santo, marcado por su movilidad en el calendario, no se limita a una fecha fija, sino que se ajusta al ciclo lunar y estacional, subrayando así su conexión con los ritmos naturales y celestiales. En resumen, el Jueves Santo trasciende las páginas de la historia para impregnar nuestras vidas con su profundo significado espiritual. Desde la última cena hasta el arresto, este día nos invita a reflexionar sobre el amor, la humildad y la fortaleza en medio de la adversidad. ¡Cada momento cuenta en la narrativa del Jueves Santo! https://www.tiktok.com/@mscnoticias
El Domingo de Ramos es el día que marca el inicio de la Semana Santa en la tradición cristiana, conmemorando la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. Este día está lleno de simbolismo y significado religioso para los cristianos, pero en términos de “misterios”, podrían interpretarse algunos aspectos simbólicos o teológicos: La entrada triunfal de Jesús: Este evento, mencionado en los evangelios, es la base del Domingo de Ramos. Jesús entra en Jerusalén montado en un burro, mientras la multitud lo aclama y lo saluda con ramas de palma y ropas extendidas en su camino. El misterio aquí radica en la comprensión del significado de esta entrada en el contexto de la misión de Jesús y su relación con el reino de Dios. El cambio de actitud de la multitud: Es intrigante cómo la multitud que aclama a Jesús en su entrada triunfal el Domingo de Ramos luego se convierte en la misma multitud que lo rechaza y pide su crucifixión pocos días después. Este cambio repentino de actitud puede ser objeto de reflexión sobre la naturaleza humana y la fragilidad de las lealtades populares. El simbolismo de las palmas y las ramas: En muchas tradiciones cristianas, se llevan palmas y ramas durante las celebraciones del Domingo de Ramos como símbolo de victoria y triunfo. Estos elementos pueden representar la victoria espiritual sobre el pecado y la muerte que Jesús trae consigo, pero también pueden ser interpretados como un recordatorio de la naturaleza efímera de los triunfos terrenales. El comienzo de la Semana Santa: El Domingo de Ramos marca el inicio de la Semana Santa, un período de intensa reflexión y conmemoración para los cristianos. Este tiempo está lleno de rituales y tradiciones que recuerdan los eventos finales de la vida de Jesús, desde la Última Cena hasta su crucifixión y resurrección. Los misterios aquí son los propios misterios de la fe cristiana: la pasión, muerte y resurrección de Jesús, y su significado para la salvación de la humanidad. En resumen, el Domingo de Ramos está envuelto en una serie de misterios religiosos y simbolismos que invitan a la reflexión y la contemplación sobre la fe cristiana y el significado de la vida y la obra de Jesucristo. https://www.tiktok.com/@mscnoticias