La empatía y la solidaridad son parte de los valores que acompañan a gran cantidad de empresas que, en circunstancias como las actuales, apoyan causas que benefician a su entorno, comenzando por su capital humano, para extenderse a programas de salud, proyectos educativos y sociales.
Este es el caso de la empresa venezolana Pickens, dedicada al diseño, fabricación y comercialización de una amplia gama de productos enfocados al sector de la iluminación, electricidad y decoración, ubicada en el estado Lara, donde su acción de responsabilidad social se ha dejado sentir desde hace 16 años.
Luz Mary Leal, gerente de Recursos Humanos de Pickens, quien lleva 11 años al frente esa unidad, refiere que por política social, siempre han atendido diversos requerimientos de las comunidades del entorno, entre ellas, el sector educativo y ONG, como la Fundación Amigos del Niño con Cáncer del estado Lara (FANCA).
“A lo largo de estos años hemos podido ayudar a escuelas cercanas, satisfaciendo necesidades de equipamiento como sanitarios, fotocopiadoras; también a estudiantes universitarios con sus proyectos; a casas hogares de adolescentes, a iglesias incluso a entes como los bomberos”, precisó Leal.
Los tradicionales apoyos a clubes deportivos para sus encuentros, hoy en pandemia, dieron paso a otras causas que exigen cada día mayores recursos, como lo son, las solicitudes de medicinas, intervenciones quirúrgicas y sepelios.
“En Pickens somos sensibles y empáticos. En estos momentos, estamos dando prioridad a las solicitudes de nuestros trabajadores. Conocemos sus necesidades de primera mano y además de garantizar una póliza de salud que de alguna forma los proteja, sabemos que hay otras situaciones en las que nos necesitan y allí estamos. Tenemos un trabajador que fue diagnosticado hace 6 años con cáncer y quien aún sigue librando la lucha contra esa enfermedad y mantiene todos sus beneficios laborales.”
Donativos a FANCA
Noraima Martínez, gerente general de la Fundación Amigos del Niño con cáncer Lara (FANCA) indicó que, durante los últimos tres años, Pickens ha colaborado con donativos especiales que les han permitido cumplir con la misión que tienen de brindar tratamiento, estudios y exámenes especiales a los niños, niñas y adolescentes inscritos en la fundación.
En la actualidad FANCA atiende a 180 niños, algunos de los cuales vienen de otros estados y son apoyados con alojamiento, para que puedan cumplir con su tratamiento.
Iluminando esperanzas
Las acciones de responsabilidad social de Pickens durante todos estos años también han involucrado la donación de bombillos y reflectores tanto a comunidades organizadas como a instituciones públicas, como los bomberos.
“Establecemos prioridades, porque lamentablemente los recursos son limitados, pero sin duda alguna se cuenta con una alta sensibilidad hacia nuestro trabajador y vecinos, esa ha sido y será nuestra constante, ayudar a quien lo necesita”, precisó Leal.
En el mundo de la genética, existe un misterioso desorden que desafía las expectativas y despierta la curiosidad de muchos: el Síndrome de Edwards, también conocido como Trisomía 18. Este trastorno genético se caracteriza por la presencia de un cromosoma extra en el par 18, llevando consigo una serie de alteraciones físicas que marcan el inicio de un camino lleno de desafíos. En condiciones normales, los seres humanos poseen un total de 46 cromosomas, heredados de ambos progenitores. Sin embargo, cuando esta carga genética se ve alterada, emergen condiciones como el Síndrome de Edwards, impactando significativamente la vida del individuo afectado y de sus seres queridos. Los síntomas del Síndrome de Edwards pueden variar desde anomalías cardíacas y renales hasta malformaciones en diferentes partes del cuerpo. Este complejo cuadro clínico conlleva a una alta tasa de mortalidad en la etapa neonatal, siendo muchos los niños que no sobreviven más allá de su primer año de vida. Sin embargo, aquellos que superan esta etapa inicial enfrentan desafíos continuos en su desarrollo y calidad de vida. A pesar de las adversidades que presenta, el Síndrome de Edwards no define la totalidad de la vida de quienes lo padecen. Familias y comunidades se unen en un esfuerzo inquebrantable para brindar apoyo y amor a aquellos afectados, buscando mejorar su calidad de vida y promover su inclusión en la sociedad. El diagnóstico precoz juega un papel crucial en la gestión de esta condición. La detección temprana permite acceder a intervenciones médicas y terapias que pueden mejorar el pronóstico y la calidad de vida del paciente. Además, brinda a las familias la oportunidad de recibir el apoyo necesario y prepararse para los desafíos que enfrentarán. En un mundo donde la diversidad genética es una realidad, es fundamental aumentar la conciencia sobre condiciones como el Síndrome de Edwards. Cada individuo merece comprensión, respeto y acceso a los recursos necesarios para alcanzar su máximo potencial, independientemente de sus diferencias genéticas. En conclusión, el Síndrome de Edwards es mucho más que una anomalía cromosómica; es un recordatorio de la diversidad y fragilidad de la vida humana. A través del conocimiento, la compasión y el apoyo, podemos crear un entorno más inclusivo y comprensivo para aquellos que enfrentan este desafío genético. https://www.tiktok.com/@mscnoticias
En diversas tradiciones esotéricas, místicas e iniciáticas, el trigo puede tener diversos significados simbólicos. Es importante tener en cuenta que estas interpretaciones pueden variar según la cultura, la religión o la corriente esotérica específica. A continuación, se presentan algunas interpretaciones comunes asociadas al trigo en contextos esotéricos e iniciáticos: Símbolo de Abundancia y Prosperidad: El trigo, al ser un alimento básico y esencial en muchas culturas, a menudo se asocia con la abundancia y la prosperidad. En este contexto, puede representar la nutrición espiritual y el crecimiento interior. Ciclo de Vida y Renacimiento: La planta de trigo pasa por diferentes etapas de crecimiento, desde la siembra hasta la cosecha. Este ciclo puede interpretarse como un símbolo del viaje espiritual, con la siembra representando el inicio de la búsqueda espiritual, el crecimiento simbolizando la evolución y la cosecha representando la realización espiritual. Ofrenda y Sacrificio: En algunas tradiciones esotéricas, el trigo ha sido utilizado como ofrenda simbólica o como parte de rituales de sacrificio. Puede representar la disposición del individuo a ofrecer algo valioso como parte de su camino espiritual. Conexión con lo Divino: Dado que el trigo ha sido un alimento fundamental en la dieta humana desde tiempos antiguos, su presencia en rituales y ceremonias puede simbolizar la conexión entre lo divino y lo terrenal. Puede representar la idea de que la espiritualidad está intrínsecamente conectada a la vida cotidiana. Elemento en Rituales de Iniciación: En algunos sistemas iniciáticos, el trigo puede desempeñar un papel simbólico durante los rituales de iniciación. Puede representar la pureza, la transformación y el renacimiento espiritual del individuo que está siendo iniciado. Es importante recordar que estas interpretaciones pueden variar y que la comprensión del simbolismo del trigo puede depender del contexto cultural y espiritual específico en el que se encuentre. Además, la interpretación personal y la experiencia individual también desempeñan un papel significativo en la comprensión de estos símbolos en el ámbito esotérico e iniciático. https://www.tiktok.com/@mscnoticias