Investigadores utilizan IA para detectar mejor los factores de riesgo de la diabetes tipo 1
La diabetes tipo 1 (DT1) es un trastorno autoinmune que puede afectar a personas de cualquier edad y para la cual actualmente no existe cura. La única esperanza es retrasar o prevenir el inicio de la enfermedad, y aquí es donde nuestra última investigación basada en el aprendizaje automático puede ayudar.
Nuestro equipo, compuesto por científicos de IBM y JDRF, una organización líder en investigación y concientización de la diabetes tipo 1, y cinco centros de investigación académica en cuatro países diferentes, acaba de publicar un estudio publicado en Diabetes Care, es el primer artículo clínico importante elaborado por esta colaboración sobre la identificación de pacientes con alto riesgo de contraer la enfermedad. El estudio de inteligencia de datos tipo 1 (T1DI) comprende una gran y única cohorte de pacientes pediátricos a quienes se les ha dado seguimiento de cerca desde su nacimiento.
Nuestro trabajo ha proporcionado información sobre el desarrollo de biomarcadores asociados con el riesgo de aparición de la diabetes tipo 1 en niños pequeños. Creemos que nuestros resultados podrían facilitar identificar niños en riesgo para ensayos clínicos cuyo objetivo es retrasar y posiblemente prevenir la aparición de la diabetes tipo 1.
Los niños, los más afectados
Se trata de una enfermedad sin cura, con dependencia de la insulina de por vida y posibles complicaciones a largo plazo, como afecciones cardiovasculares, insuficiencia renal y retinopatía diabética, que puede provocar ceguera. La diabetes tipo 1 es un trastorno autoinmune que puede alcanzar a personas de cualquier edad, pero generalmente se diagnostica durante la infancia o la adolescencia. En los Estados Unidos, la diabetes Tipo 1 afecta a aproximadamente 1,6 millones de personas, muchas de las cuales son niños pequeños y adolescentes, según la Asociación Estadounidense de Diabetes. Y este número va en aumento.
Esta enfermedad generalmente se desarrolla en un plazo de cinco a 15 años, con la pérdida gradual de células beta productoras de insulina en el páncreas. Es este desarrollo gradual, a lo largo de décadas, lo que ha inducido a los científicos a buscar formas de ayudar a retrasar o prevenir la manifestación de la enfermedad. Estamos entre ellos, armados con la última tecnología de aprendizaje automático.
El equipo de investigación de IBM creó la cohorte del estudio T1DI, la más grande de su tipo para predictores de diabetes infantil tipo 1. En asociación con JDRF, que reunió a un equipo de más de 30 científicos de nueve instituciones en cuatro países, se combinaron datos de cinco estudios de evolución natural de diabetes tipo 1 dirigidos por esas instituciones, algunos de los cuales comenzaron hace más de 30 años.
Todos estos estudios se centraron en el desarrollo de la diabetes Tipo 1; sin embargo, el diseño, la duración y los datos recopilados variaban de un estudio a otro, por lo cual, tuvimos que integrar conjuntos de datos individuales de una manera que resultara común a todos los estudios. Estos conjuntos de datos incluían mediciones de autoanticuerpos de los islotes, biomarcadores específicos de la diabetes tipo 1 que pueden desarrollarse y mutar con el tiempo. Los biomarcadores son sustancias medibles detectables mediante pruebas de laboratorio u otros mecanismos y que indican la presencia potencial o el riesgo de desarrollar una enfermedad. El término "seroconversión" describe el momento más temprano en el que se detectan estos autoanticuerpos en un análisis de sangre y marca el inicio de la autoinmunidad.
Como los datos habían sido recopilados a lo largo de muchos años y en múltiples ubicaciones, las pruebas de laboratorio para biomarcadores utilizaban diferentes métodos o normas de informes, tanto entre los distintos centros como a lo largo del tiempo, y los métodos de genotipado diferían en resolución. Esta fue una complicación adicional, por lo que también se armonizaron los datos para que los resultados informados de diferentes maneras pudieran analizarse en conjunto.
Aprendizaje automático avanzado, en funcionamiento
Una vez que se realizó la preparación de los datos, podría comenzar el trabajo analítico real.
Utilizamos métodos estadísticos y de aprendizaje automático avanzados, y nuestro equipo de investigación desarrolló herramientas gráficas innovadoras e interactivas. Un documento sobre esas herramientas de visualización, DPVis, se publicó en 2020 en IEEE Transactions on Visualization and Computer Graphics. Ver: https://ieeexplore.ieee.org/document/9058722. Otro sobre la simulación de detección a nivel de población, utilizando la herramienta COOL (Collaborative Open Outcomes tooL), se presentará en el próximo Simposio Anual AMIA 2021.
A lo largo de la investigación, aplicamos algoritmos avanzados de aprendizaje automático para identificar los predictores del inicio de la diabetes Tipo 1. También nos basamos en los resultados de las pruebas de laboratorio recopilados a lo largo del tiempo de de cada participante del estudio, específicamente para los tres autoanticuerpos de islotes asociados con el desarrollo de diabetes tipo 1. Nuestro análisis reveló nuevos patrones de desarrollo de autoanticuerpos y sus vínculos con otros factores de riesgo.
Al analizar estos datos, los investigadores hallaron que la cantidad de autoanticuerpos de islotes presentes en la seroconversión[1], el punto más temprano en el desarrollo de la autoinmunidad, permite predecir de manera confiable el riesgo de aparición de diabetes tipo 1 en niños pequeños durante períodos de hasta 10 a 15 años a futuro.
Para los niños con múltiples autoanticuerpos (más de un tipo de autoanticuerpo de islotes) en el momento de la seroconversión, el riesgo de desarrollar DT1 es muy alto, alrededor del 90% en un período de 15 años. Además, cuanto menor es la edad a la que los niños desarrollan múltiples autoanticuerpos, mayor es el riesgo, alcanzando su punto máximo entre los dos y los cuatro años de edad. También confirmaron que los genotipos para la diabetes tipo 1 no afectan el riesgo en niños que dan positivo a múltiples autoanticuerpos.
Sin embargo, nuestra investigación también ha arrojado nueva luz sobre el riesgo de diabetes tipo 1 en niños que dan positivo a un solo autoanticuerpo. Su riesgo de aparición de diabetes tipo 1 a 15 años es notablemente más bajo, solo alrededor del 30%, especialmente para los niños con un solo autoanticuerpo en el momento de la seroconversión y los que permanecen con un solo autoanticuerpo a partir de entonces. Aunque este riesgo parece sustancial en general, encontramos que su evaluación de riesgo individual puede mejorarse en función del perfil genético y una prueba de anticuerpos repetida en aproximadamente dos años.
En otras palabras, encontramos que el riesgo general de desarrollar diabetes tipo 1 en niños con un solo autoanticuerpo sigue siendo considerablemente más bajo, pero es especialmente bajo si estos niños no desarrollan un segundo autoanticuerpo en los dos años posteriores a la seroconversión. Además, los niños que permanecen positivos para un solo autoanticuerpo, y que además tienen un genotipo de bajo riesgo para DT1, tienen un riesgo sustancialmente menor: solo un 12% en general, o aprox. una tercera parte menos que los que poseen genotipos de alto riesgo.
Estos hallazgos podrían ayudar a identificar y estratificar a los participantes para el reclutar en el ensayo según el número de autoanticuerpos y los resultados genéticos. De manera similar, los resultados podrían ayudar a informar la detección de rutina, la cadencia de monitoreo y el manejo general de los niños en riesgo. La detección y la vigilancia basadas en la población generalmente se realizan para enfermedades para las que se dispone de una cura o un tratamiento inmediato, lo que aún no es el caso de la diabetes tipo 1. Sin embargo, la aparición y el diagnóstico inicial de la diabetes tipo 1 a menudo se asocian con complicaciones potencialmente mortales de la cetoacidosis diabética (CAD), lo que aumenta la importancia de la detección temprana.
La identificación temprana de los niños en riesgo podría ayudar a las familias y los cuidadores a comprender mejor el riesgo y reconocer los primeros signos de CAD para reducir su incidencia al inicio. Esto es particularmente valioso ya que la investigación ha demostrado tasas reducidas de CAD en los participantes del estudio que fueron evaluados y controlados de forma rutinaria para determinar si desarrollaban autoanticuerpos, al menos en los estudios constituyentes de T1DI.
A la luz de la investigación en curso para retrasar o prevenir la aparición de la diabetes tipo 1, como en el consorcio TrialNet, los hallazgos pueden proporcionar información útil para que los programas de detección realicen una identificación temprana de las personas de alto riesgo como posibles candidatos para tales ensayos. Esto podría beneficiar no solo a los niños que participan, sino también a toda la comunidad de investigación de la diabetes Tipo 1.
Además, esta investigación ha validado importantes resultados previos de la ADA (American Diabetes Association), JDRF y Endocrine Society. En 2015, estos hallazgos condujeron a una propuesta para la estadificación de la diabetes tipo 1 basada en el desarrollo de la autoinmunidad de los islotes como etapa 1.
Las etapas de la enfermedad se utilizan a menudo para ayudar a los médicos a identificar cuándo los pacientes deben ser controlados o tratados de diferentes maneras. Por ejemplo, las etapas tempranas de la enfermedad pueden significar un seguimiento menos frecuente y un tratamiento limitado o nulo, mientras que las etapas posteriores pueden requerir visitas mucho más frecuentes y tratamientos más agresivos u otras intervenciones. La estadificación mejorada ayuda a los médicos y cuidadores a brindar la mejor atención a sus pacientes en todas las etapas de la enfermedad.
En resumen encontramos combinaciones específicas de factores que implican patrones de autoanticuerpos y genética asociados con diferentes tasas y probabilidades de desarrollar diabetes tipo 1. Nuestros resultados no solo allanan el camino para una mejor comprensión de los factores de riesgo de la diabetes tipo 1, sino que también pueden ayudar a desarrollar pautas para la detección, el seguimiento y el tratamiento de rutina de pacientes pediátricos en riesgo.
Dichas pautas pueden ayudar a reducir las complicaciones al inicio y permitir identificar a pacientes que podrían beneficiarse participando de ensayos clínicos en curso destinados a retrasar o prevenir la aparición de la diabetes tipo 1. Con suerte, algún día incluso podrían ayudar a prevenir la diabetes tipo 1 por completo.
Desde los cimientos del activismo ambiental hasta la urgente llamada a la acción de hoy, el Día de la Tierra ha evolucionado desde su modesto comienzo en 1968 hasta convertirse en un movimiento global que busca la preservación de nuestro planeta. En aquel entonces, el Servicio de Salud Pública de EE. UU. organizó el Simposio de Ecología Humana, un punto de partida crucial donde los estudiantes escucharon a científicos destacados hablar sobre los efectos del deterioro ambiental en la salud humana. Dos años más tarde, en 1970, el senador y activista ambiental Gaylord Nelson propuso la creación de una agencia ambiental, desencadenando una manifestación masiva que atrajo a miles de estudiantes y comunidades de todo Estados Unidos. Esta presión social culminó en la creación de la Agencia de Protección Ambiental y una serie de leyes destinadas a proteger nuestro medio ambiente, sentando así las bases para el movimiento ambiental moderno. En 1972, la primera Cumbre de la Tierra en Estocolmo reunió a líderes mundiales para abordar los problemas ambientales a escala global, marcando un hito en la conciencia ambiental mundial. El lema del Día Internacional de la Madre Tierra para el año 2024, “Planeta vs plásticos”, subraya la urgencia de abordar la crisis de los plásticos. La necesidad de reducir la producción de plásticos en un 60% para el año 2040 es imperativa, ya que estos contaminantes afectan directamente la salud humana y la salud del planeta. Es fundamental y urgente la necesidad de acabar con los plásticos por el bien de la salud humana y del planeta. Desde sus modestos inicios hasta su papel actual como plataforma para la conciencia ambiental global, el Día de la Tierra continúa inspirando a personas de todo el mundo a unirse en la lucha por un futuro sostenible. ¡Cada gesto cuenta en esta batalla por nuestro hogar compartido! https://www.tiktok.com/@mscnoticias
El Domingo de Ramos es el día que marca el inicio de la Semana Santa en la tradición cristiana, conmemorando la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. Este día está lleno de simbolismo y significado religioso para los cristianos, pero en términos de “misterios”, podrían interpretarse algunos aspectos simbólicos o teológicos: La entrada triunfal de Jesús: Este evento, mencionado en los evangelios, es la base del Domingo de Ramos. Jesús entra en Jerusalén montado en un burro, mientras la multitud lo aclama y lo saluda con ramas de palma y ropas extendidas en su camino. El misterio aquí radica en la comprensión del significado de esta entrada en el contexto de la misión de Jesús y su relación con el reino de Dios. El cambio de actitud de la multitud: Es intrigante cómo la multitud que aclama a Jesús en su entrada triunfal el Domingo de Ramos luego se convierte en la misma multitud que lo rechaza y pide su crucifixión pocos días después. Este cambio repentino de actitud puede ser objeto de reflexión sobre la naturaleza humana y la fragilidad de las lealtades populares. El simbolismo de las palmas y las ramas: En muchas tradiciones cristianas, se llevan palmas y ramas durante las celebraciones del Domingo de Ramos como símbolo de victoria y triunfo. Estos elementos pueden representar la victoria espiritual sobre el pecado y la muerte que Jesús trae consigo, pero también pueden ser interpretados como un recordatorio de la naturaleza efímera de los triunfos terrenales. El comienzo de la Semana Santa: El Domingo de Ramos marca el inicio de la Semana Santa, un período de intensa reflexión y conmemoración para los cristianos. Este tiempo está lleno de rituales y tradiciones que recuerdan los eventos finales de la vida de Jesús, desde la Última Cena hasta su crucifixión y resurrección. Los misterios aquí son los propios misterios de la fe cristiana: la pasión, muerte y resurrección de Jesús, y su significado para la salvación de la humanidad. En resumen, el Domingo de Ramos está envuelto en una serie de misterios religiosos y simbolismos que invitan a la reflexión y la contemplación sobre la fe cristiana y el significado de la vida y la obra de Jesucristo. https://www.tiktok.com/@mscnoticias