María Isabel López ha sido designada como nueva Presidenta Ejecutiva del Banco Exterior, institución con más de 60 años en el sistema financiero venezolano, siendo la única mujer al frente de una entidad bancaria privada en el país actualmente. En este sentido, asumirá en breve las riendas de la organización, en el entendido que previamente se dará cumplimiento a los procesos y requerimientos legales previstos en la normativa vigente.
Dicha designación se registra luego de haber desempeñado por cuatro años de modo sobresaliente la función de Vicepresidenta de Tecnología de la Información, con una gestión en la que destacan sus logros en la ejecución exitosa del Proyecto de Reconversión Monetaria, la reducción de costos mediante la innovación tecnológica y la preservación de la continuidad operativa de la organización.
María Isabel López es Ingeniera Informático de la Universidad Simón Bolívar y cuenta con casi tres décadas de experiencia en altos cargos en el ámbito tecnológico en empresas de punta como Banco Exterior C.A. Banco Universal, DIRECTV Latin America y Procter & Gamble. Además, ocupó la presidencia del Consejo Asesor de CIONET, capítulo Venezuela.
López expresó en sus palabras iniciales, que el Banco Exterior continuará como una institución “donde la innovación se ha decidido como estrategia fundamental para el progreso”, teniendo en cuenta los aportes de sus colaboradores desde la diversidad y siempre en función de su cartera de clientes.
La nueva presidenta, quien continuará con toda la gestión exitosa del Banco Exterior, cuenta con el respaldo de la Junta Directiva, el Comité Ejecutivo y accionistas principales de la Institución, con la misión de alcanzar los nuevos retos planteados en un entorno cada vez más competitivo y cambiante, en el cual la innovación y transformación digital han adquirido todavía mayor protagonismo por la actual situación de contingencia que atraviesa el país. En este contexto, la organización seguirá apostando por el desarrollo del talento interno, como clave para seguir construyendo el futuro, haciendo de Banco Exterior un gran lugar para trabajar.
La Dirección General de la Institución agradeció al presidente saliente Nelson Acosta, por todos sus aportes, y le ofreció la más cordial bienvenida a María Isabel López en su nuevo cargo, manifestando que cuenta con todo el apoyo en esta nueva e ilusionante etapa a transitar, convencidos que lo mejor está por llegar.
El 17 de noviembre conmemora el Día Internacional del Síndrome de Smith Magenis, un hito que destaca la relevancia de esta condición genética descubierta en los años 80 por Ana Smith y Ellen Magenis, una pionera en genética molecular. Este síndrome, vinculado a una deficiencia en el cromosoma 17, afecta aproximadamente a 1 persona de cada 15.000/25.000 nacimientos, manifestándose con una variedad de síntomas físicos y conductuales, acompañados de un retraso mental de gravedad variable y anomalías congénitas. Las asociaciones dedicadas al Síndrome de Smith Magenis organizan eventos con el objetivo claro de sensibilizar tanto a la población en general como a los profesionales de la salud. Entre las metas fundamentales de estas iniciativas se encuentran: Impulsar la Detección Precoz: Fomentar la identificación temprana de la enfermedad, garantizando un abordaje más efectivo desde sus primeras etapas. Atender las Necesidades de los Afectados: Buscar soluciones integrales que aborden las necesidades terapéuticas, educativas y asistenciales de quienes conviven con este síndrome, así como proporcionar un sólido apoyo a sus familias. Promover la Investigación: Lanzar un llamamiento apasionado a la investigación, destacando la importancia de explorar y comprender más a fondo esta patología para mejorar la calidad de vida de quienes la padecen. Generar Conciencia Pública: Ampliar el conocimiento general sobre el Síndrome de Smith Magenis es esencial. Con campañas educativas, se busca sensibilizar a la población acerca de la existencia de esta condición y fomentar la empatía y la comprensión.
El Día de los Muertos es una festividad tradicional mexicana que tiene raíces profundas en la cultura indígena precolombina de México, especialmente entre los pueblos aztecas, mayas, purepechas y totonacas. Esta celebración se lleva a cabo el 1 y 2 de noviembre, coincidiendo con el Día de Todos los Santos y el Día de los Muertos en el calendario católico, lo que es una muestra de la fusión de las tradiciones indígenas y europeas después de la conquista española en el siglo XVI. Las razones por las cuales se celebra el Día de los Muertos en México son variadas: Conexión con las creencias indígenas: Los pueblos indígenas de México tenían una profunda conexión con la muerte y creían que la vida después de la muerte era una parte natural del ciclo de la vida. Celebraban a sus muertos a través de rituales y ofrendas mucho antes de la llegada de los españoles. Sincretismo religioso: Después de la conquista española, la religión católica se combinó con las creencias indígenas para dar lugar a esta festividad. Los colonizadores españoles intentaron reemplazar las creencias indígenas con las suyas, pero en lugar de erradicar las tradiciones preexistentes, se incorporaron elementos católicos en la celebración de los muertos. Homenaje a los seres queridos fallecidos: El Día de los Muertos es una forma de honrar y recordar a los seres queridos que han fallecido. Las familias crean altares o ofrendas que incluyen fotos, velas, flores, alimentos y objetos personales de los difuntos para recibir sus espíritus y celebrar su memoria. Celebración de la vida: Aunque pueda parecer paradójico, el Día de los Muertos no es una festividad triste, sino más bien una celebración de la vida. Se cree que durante estos días, los difuntos regresan a visitar a sus seres queridos, y se les recibe con música, baile y comida. Conservación de la identidad cultural: El Día de los Muertos es una de las festividades más importantes en la cultura mexicana, y su celebración contribuye a la preservación de las tradiciones y la identidad cultural del país. En resumen, el Día de los Muertos en México es una festividad arraigada en las creencias indígenas, el sincretismo religioso y la conexión con los seres queridos fallecidos. Es una celebración única que combina elementos de alegría, respeto y espiritualidad, y juega un papel importante en la cultura mexicana.