La sobreexposición a la luz azul provoca diferentes daños en la salud, especialmente de los más pequeños, con consecuencias que van desde afectar el ciclo de sueño hasta alteraciones en las células de la retina del ojo. Con los lentes con filtro anti-luz azul de RayBlue4Kids, marca que a partir del mes de octubre empezó a operar en nuestro país, los niños pueden recibir la protección adecuada para evitar ser afectados por la luz emitida por dispositivos electrónicos.
La iniciativa de comercializar lentes de este tipo nace para atender la preocupación de los padres que, debido al confinamiento y la modalidad de clases en línea, han notado el impacto de la luz azul en sus hijos, ya que estos aumentaron sus horas frente a dispositivos que la emiten. Esto ha tenido como consecuencia una serie de síntomas producidos por la sobreexposición como dolores de cabeza, fatiga ocular, desorden del sueño, ojos secos, entre otros.
La luz azul es parte de la luz visible, emitida por fuentes naturales como el sol y, también, fuentes artificiales como las computadoras, teléfonos celulares y televisores. Asimismo, un 25% de la luz blanca es, en realidad, luz azul. Se trata de un componente natural y necesario de la luz.
Aun así, la sobreexposición a la luz azul es peligrosa por lo que, RayBlue4Kids diseñó un tipo de lentes Anti Blue Light Eyeglasses de policarbonato con un filtro contra luz artificial que disminuye la cantidad de luz azul recibida por el ojo. Además, para adaptarse a los gustos de los niños, cada modelo unisex trae hasta siete combinaciones de colores diferentes para elegir.
Emely Marcano, madre de una niña de 5 años, explicó que su hija tiene ya 4 meses utilizando los lentes RayBlue4Kids y ha notado que se siente más a gusto frente a la computadora y tableta. Además, señaló que “la fatiga en los ojos desapareció, así como los dolores de cabeza, y el sueño por las noches volvió a la normalidad”, resaltando que la niña entiende lo importante que es mantenerse protegida contra la luz azul.
Los lentes de RayBlue4Kids pueden ser adquiridos en la cuenta de Instagram @rayblue4kidsve. De esta forma, Patrick Sayols, director para Venezuela, indica que la marca busca prevenir los impactos negativos en la vista que surgen a partir de las nuevas modalidades de clases en línea, siendo un aporte para proteger los ojos de los más pequeños del hogar.
______________________________________________________
[wpedon id=”97802″]
El 17 de noviembre conmemora el Día Internacional del Síndrome de Smith Magenis, un hito que destaca la relevancia de esta condición genética descubierta en los años 80 por Ana Smith y Ellen Magenis, una pionera en genética molecular. Este síndrome, vinculado a una deficiencia en el cromosoma 17, afecta aproximadamente a 1 persona de cada 15.000/25.000 nacimientos, manifestándose con una variedad de síntomas físicos y conductuales, acompañados de un retraso mental de gravedad variable y anomalías congénitas. Las asociaciones dedicadas al Síndrome de Smith Magenis organizan eventos con el objetivo claro de sensibilizar tanto a la población en general como a los profesionales de la salud. Entre las metas fundamentales de estas iniciativas se encuentran: Impulsar la Detección Precoz: Fomentar la identificación temprana de la enfermedad, garantizando un abordaje más efectivo desde sus primeras etapas. Atender las Necesidades de los Afectados: Buscar soluciones integrales que aborden las necesidades terapéuticas, educativas y asistenciales de quienes conviven con este síndrome, así como proporcionar un sólido apoyo a sus familias. Promover la Investigación: Lanzar un llamamiento apasionado a la investigación, destacando la importancia de explorar y comprender más a fondo esta patología para mejorar la calidad de vida de quienes la padecen. Generar Conciencia Pública: Ampliar el conocimiento general sobre el Síndrome de Smith Magenis es esencial. Con campañas educativas, se busca sensibilizar a la población acerca de la existencia de esta condición y fomentar la empatía y la comprensión.
El Día de los Muertos es una festividad tradicional mexicana que tiene raíces profundas en la cultura indígena precolombina de México, especialmente entre los pueblos aztecas, mayas, purepechas y totonacas. Esta celebración se lleva a cabo el 1 y 2 de noviembre, coincidiendo con el Día de Todos los Santos y el Día de los Muertos en el calendario católico, lo que es una muestra de la fusión de las tradiciones indígenas y europeas después de la conquista española en el siglo XVI. Las razones por las cuales se celebra el Día de los Muertos en México son variadas: Conexión con las creencias indígenas: Los pueblos indígenas de México tenían una profunda conexión con la muerte y creían que la vida después de la muerte era una parte natural del ciclo de la vida. Celebraban a sus muertos a través de rituales y ofrendas mucho antes de la llegada de los españoles. Sincretismo religioso: Después de la conquista española, la religión católica se combinó con las creencias indígenas para dar lugar a esta festividad. Los colonizadores españoles intentaron reemplazar las creencias indígenas con las suyas, pero en lugar de erradicar las tradiciones preexistentes, se incorporaron elementos católicos en la celebración de los muertos. Homenaje a los seres queridos fallecidos: El Día de los Muertos es una forma de honrar y recordar a los seres queridos que han fallecido. Las familias crean altares o ofrendas que incluyen fotos, velas, flores, alimentos y objetos personales de los difuntos para recibir sus espíritus y celebrar su memoria. Celebración de la vida: Aunque pueda parecer paradójico, el Día de los Muertos no es una festividad triste, sino más bien una celebración de la vida. Se cree que durante estos días, los difuntos regresan a visitar a sus seres queridos, y se les recibe con música, baile y comida. Conservación de la identidad cultural: El Día de los Muertos es una de las festividades más importantes en la cultura mexicana, y su celebración contribuye a la preservación de las tradiciones y la identidad cultural del país. En resumen, el Día de los Muertos en México es una festividad arraigada en las creencias indígenas, el sincretismo religioso y la conexión con los seres queridos fallecidos. Es una celebración única que combina elementos de alegría, respeto y espiritualidad, y juega un papel importante en la cultura mexicana.