Caracas Fútbol Club se despidió de la CONMEBOL Libertadores 2020 al caer derrotado como visitante ante el Club Atlético Boca Juniors por 3-0, con goles de Lisandro López de cabeza y dupleta de Carlos Tévez. Los Rojos del Ávila continuarán su participación a nivel internacional en la CONMEBOL Sudamericana.
En los primeros minutos como era de esperarse el conjunto local se adueñó de la pelota, basculando en zona tres de la cancha ante un ordenado conjunto capitalino, que estuvo atento bien parado esperando capitalizar un error xeneize para un contragolpe. Fue así como a los seis minutos tras un balón perdido en la mitad de la cancha le quedó a Osei Bonsu, el ghanés no se lo pensó mucho para patear de larga distancia para que el balón pasara cerquita de la parte alta del poste.
A los 13 minutos una incursión de Robert Hernández por la izquierda provocó un penal favorable al Caracas, tras haber obstaculizado Buffarini el centro del 10 con el brazo extendido al barrerse en el área. Lamentablemente para el Rojo no pudo ser traducido en gol puesto que Esteban Andrada se lanzó de gran forma hacia su izquierda y detuvo el penal para que se mantuviese la paridad a cero.
Cuatro minutos más tarde Carlos Tévez se tuvo confianza, se metió por la derecha y disparó al borde del área para pegar la pelota en la parte alta del poste. Con el correr de los minutos las ocasiones de gol para Boca se multiplicaron mientras que el Caracas esperaba sorprender con algún contragolpe.
Hasta que a los 27 minutos se abrió el marcador de pelota parada. Un tiro de esquina cobrado desde la derecha fue cabeceado por Lisandro López a la altura del punto penal para mandar el balón al fondo de la red. Seguidamente a los 33 minutos un contragolpe agarró mal parado al Caracas, que se encontraba en campo contrario volcado al ataque en búsqueda del empate. Centro desde la izquierda de Edwin Cardona le sirvió a Carlos Tévez para empujar la pelota y conseguir la segunda diana de la noche.
El tercero para el conjunto local llegó a los 44 minutos con un balón filtrado por el medio de Cardona para Salvio, quien no la pudo dominar pero la defensa capitalina tampoco la pudo despejar de un todo y el rebote le quedó a Carlos Tévez, quien siguió con balón dominado y con su pierna derecha disparó cruzado para su segundo tanto de la noche.
En el comienzo de la segunda mitad el Caracas arrancó con todo en búsqueda de los tantos que los metiera en el partido y en la lucha por la clasificación. Leo Flores disparó desde el borde del área con su pierna izquierda a los 47 minutos pero desafortunadamente el balón pasó por encima del arco.
El resto del complemento fue de mucha tensión. Boca tuvo algunas ocasiones que fueron solventadas por paradas de Beycker Velásquez. Por varios minutos el Caracas estuvo clasificado a los octavos de final puesto que en Asunción Libertad caía de local por 1-4 ante el DIM, hasta que desafortunadamente Sebastián Ferreyra anotó el gol que les devolvió la vida.
Caracas necesitaba convertir uno para volver a soñar. La otra gran ocasión de gol que tuvo el conjunto dirigido por Noel Sanvicente en la segunda mitad se dio a los 87 minutos del partido, con una jugada de Robert Hernández por la derecha, en la que eludió a un rival y cuando fue a patear su disparo pasó por encima del arco.
Con el resultado el conjunto capitalino finalizó tercero del grupo H y jugará la Copa Sudamericana a partir de la segunda fase ante un rival que conocerá este viernes 23 de octubre tras el sorteo que se realizará en la sede de la CONMEBOL.
FICHA TÉCNICA:
CLUB ATLÉTICO BOCA JUNIORS (3): Esteban Andrada, Julio Buffarini (Leonardo Jara 71’), Lisandro López, Carlos Izquierdoz, Fabián Fabra; Edwin Cardona (Gonzalo Maroni 87’), Guillermo Fernández, Nicolás Capaldo, Eduardo Salvio; Franco Soldano (Ramón Ávila 57’) y Carlos Tévez (Agustín Obando 72’) | DT: Miguel Ángel Russo.
CARACAS FÚTBOL CLUB (0): Beycker Velásquez; Luis Casiani (Javier Maldonado 75’), Carlos Rivero, Rosmel Villanueva, Diego Osío; Ricardo Andreutti (Saúl Guarirapa 46’), Leonardo Flores, Anderson Contreras (Jorge Echeverría 81’), Osei Bonsu (Diego Castillo 70’), Robert Hernández y Alexis Blanco (Rodrigo Febres 75’) | DT: Noel Sanvicente.
GOLES: Lisandro López 27’ y Carlos Tévez 33’ y 44’ (BOC).
AMONESTADOS: Rosmel Villanueva 15’ y Alexis Blanco 49’ (CFC).
EXPULSADO: No hubo.
ÁRBITRO: Christian Fereyra (Uruguay).
Estadio Alberto José Armando, Ciudad de Buenos Aires, Argentina.
La Organización de las Naciones Unidas proclama el 18 de septiembre como Día Internacional de la Igualdad Salarial, con la finalidad de resaltar la importancia de equipar la igualdad salarial por un trabajo de igual valor. La igualdad salarial o igualdad de remuneración se refiere al derecho de hombres y mujeres a recibir una remuneración equitativa por trabajos de igual valor. Este concepto considera factores como competencias, condiciones laborales, calificaciones y niveles de responsabilidad en el desempeño del puesto. Además, la igualdad salarial refuerza los derechos humanos y la igualdad de género, y cuenta con el respaldo de actores clave como la comunidad internacional, la sociedad civil, agencias de ONU Mujeres, los Estados Miembros y la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Como antecedente histórico, tras la Segunda Guerra Mundial, en 1951 se estableció el Convenio sobre Igualdad de Remuneración, reconocido como el primer instrumento internacional que impulsó la incorporación masiva de las mujeres al mundo laboral, ocupando posiciones en la primera línea de producción en varios países. La creación de este convenio surgió como respuesta a la desigualdad salarial, vista como una clara forma de discriminación laboral. Este hito marcó el comienzo de un avance significativo hacia una mayor igualdad de género en el mercado laboral, estableciendo las bases para eliminar brechas económicas y promover un entorno laboral más justo e inclusivo. https://www.tiktok.com/@mscnoticias
La leyenda de Rómulo y Remo narra la historia de los fundadores míticos de Roma. Según el relato, Ascanio, hijo del héroe troyano Eneas, estableció la ciudad de Alba Longa a orillas del río Tíber. A lo largo de los años, sus descendientes reinaron sobre esta ciudad, hasta llegar a Numitor y su hermano Amulio. Amulio destronó a Numitor y, para evitar que tuviera descendencia que reclamara el trono, obligó a su hija, Rea Silvia, a convertirse en sacerdotisa de la diosa Vesta, asegurando así su virginidad. Sin embargo, Marte, el dios de la guerra, se unió a Rea Silvia, quien dio a luz a los gemelos Rómulo y Remo. Temiendo por su vida, Amulio ordenó que los recién nacidos fueran arrojados al Tíber en una canasta. La corriente los llevó hasta la zona de las siete colinas, cerca de la desembocadura del Tíber. Allí, una loba llamada Luperca los descubrió mientras bebía agua. Ella los llevó a su guarida en el Monte Palatino y los amamantó hasta que un pastor los encontró. El pastor y su esposa criaron a los mellizos, quienes al llegar a la adultez restauraron a Numitor en el trono de Alba Longa. Rómulo y Remo decidieron fundar una nueva ciudad como colonia de Alba Longa en el lugar donde la loba los había protegido. Así nació Roma, con Rómulo y Remo como sus primeros reyes. El mito de la loba que amamantó a los gemelos ha sido objeto de diversas interpretaciones. Algunos creen que la loba fue en realidad una mujer que cuidó de ellos, ya que el término latino “lupa” también se usaba para referirse despectivamente a las prostitutas de la época. Este relato, cargado de simbolismo, es fundamental para entender el origen mítico de una de las civilizaciones más influyentes de la historia. https://www.tiktok.com/@mscnoticias