A cuatro notables científicos venezolanos
Este galardón, que se entrega desde 1983, reconoce el talento, la creatividad y la productividad de los investigadores venezolanos
Hoy 13 de noviembre se realizó el acto protocolar de entrega del Premio Fundación Empresas Polar Lorenzo Mendoza Fleury en su edición XIX, en la que se reconoció la labor de cuatro destacados investigadores y científicos, que realizan sus trabajos en el ámbito de las ciencias básicas, física, química, biología, matemáticas, y sus interdisciplinas.
En esta edición los científicos reconocidos son: María Eugenia Grillet, de la Universidad Central de Venezuela, por biología; Henryk Gzyl del Instituto de Estudios Superiores de Administración – Iesa-, por matemáticas; Jafet Nassar del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas –Ivic, y Alberto Paníz-Mondolfi del Instituto de Investigaciones Biomédicas, ambos en biología.
Los nuevos galardonados pasarán a formar parte del patrimonio científico de Venezuela y contarán con el apoyo de Fundación Empresas Polar para sus investigaciones, además de recibir un diploma y un monto en efectivo.
“En Empresas Polar y su fundación, nuevamente, estamos honrados de poder ser portadores de buenas noticias, de seguir confiando en nuestros investigadores, quienes asumen la creatividad como el más importante de los recursos científicos. Junto a ustedes, y a quienes los precedieron, nos es muy fácil imaginar el país que merecemos todos.” destacó Leonor Giménez de Mendoza, Presidenta de Fundación Empresas Polar.
“Continuaremos apoyando el desarrollo de la ciencia en Venezuela, confiando en las instituciones, en los centros de investigación, en nuestras universidades, pero sobre todas las cosas seguiremos confiando en el país, a quien nos debemos y honramos con nuestro trabajo consecuente de todos los días, con la certeza que descansa sobre las infinitas posibilidades que nos ofrecen nuestros científicos, investigadores, nuestra empresa, la gente, y por supuesto nuestra Venezuela”, agregó.
“La selección de los cuatro ganadores de esta edición fue el resultado de importantes sesiones de trabajo en las que 35 candidatos de diferentes universidades e instituciones del país, fueron evaluados. El comité de selección del premio está conformado por Ismardo Bonalde, Alberto Fernández, María Cristina Hernández, Alexis Mendoza León, Fernando Mora y Flor Pujol. El premio Lorenzo Mendoza Fleury es diseñado, coordinado y patrocinado por Fundación Empresas Polar, sin embargo, es la comunidad científica venezolana la que, evalúa y selecciona a los candidatos y posteriores ganadores. “Es un premio otorgado por la comunidad científica a la comunidad científica”, destacó Laura Díaz, gerente de Programas Institucionales de Fundación Empresas Polar.
El desarrollo de las ciencias en el país: con talento, creatividad y productividad
María Eugenia Grillet es profesora titular desde el año 2011 en el Instituto de Zoología y Ecología Tropical, IZET.
Entre sus aportes ha propuesto estrategias y soluciones para reducir el impacto de enfermedades infecciosas a escala local y regional, trabajando en tres sistemas: Oncocercosis, una enfermedad parasitaria tropical que afecta la piel y los ojos; la Malaria y el complejo viral Dengue, Chikungunya, Zika, en los que estudia el parásito y el insecto trasmisor. Sus contribuciones han sido fundamentales en salud pública y han tenido gran impacto en el control de enfermedades.
El área de trabajo de Henryk Gzyl se reparte entre la física y la matemática. En el área matemática sus resultados están vinculados a la teoría de las probabilidades, aplicaciones a las ecuaciones diferenciales y problemas inversos. En el área de la física, sus resultados están vinculados a sistemas cuánticos, propagación de ondas y métodos probabilísticos en el análisis de ondas.
La diversidad de áreas en las que ha obtenido resultados hablan de su talento y creatividad, en particular, su uso del método de máxima entropía en diversos contextos de las áreas antes mencionadas, lo convierte en uno de los mayores expertos de ese método en todo el mundo.
Jafet Nassar es licenciado en Biología (magna cum laude) de la Universidad Central de Venezuela y Ph. D. en Biología Tropical de la Universidad de Miami. Actualmente, es investigador titular y jefe del Laboratorio de Biología de Organismos del Centro de Ecología en el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC).
Ha estudiado la biología de los murciélagos y la biología reproductiva de las plantas polinizadas y dispersadas por ellos (los cardones) en las zonas áridas venezolanas.
Luego de treinta años de estudios se ha convertido en un experto reconocido internacionalmente en el estudio de los murciélagos neotropicales y las plantas de las que se alimentan y polinizan, así como también, de las interacciones planta-animal y de los ecosistemas que ellos habitan.
Por su parte, Alberto Paniz-Mondolfi es médico cirujano de la Universidad Central de Venezuela, del año 2002, con Maestría en Enfermedades Parasitarias y Tropicales de la Universidad de Valencia, España. Actualmente es director académico de la Clínica Instituto de Investigaciones Biomédicas de Cabudare, estado Lara. Con tan solo 43 años de edad, ha producido más de 100 publicaciones en revistas de alto impacto en su especialidad.
Sus trabajos de investigación abarcan múltiples campos, en el área de las enfermedades infecciosas. Ha realizado importantes contribuciones y una patente en el tratamiento del Mal de Chagas, a partir de modelos clínicos en humanos y perros. Finalmente, ha contribuido en el campo de la salud pública por su participación en revistas de alto prestigio internacional.
Antes de que se inventaran las gomas de borrar (en el siglo XVIII), se usaba miga de pan húmeda, y por eso hoy en día todavía hay gomas que conservan ese nombre. En caso de necesidad, un trozo de tu almuerzo puede hacer un gran arreglo en tus apuntes. El lápiz aportaba la posibilidad de corrección, borrándose hasta la aparición de la goma de borrar con gomas de migajón. Estas gomas utilizaban migas de pan con dos inconvenientes: necesitaban pan fresco y eran poco precisas. Cuando los españoles exploraban América observaron como los aztecas jugaban con unas pelotas que botaban de forma endiablada y que, según el soldado de Hernán Cortés llamado Bernán Díaz del Castillo, parecían movidas por espíritus malignos. Efectivamente, al igual que en otras civilizaciones, los aztecas se divertían con juegos de pelota, utilizando para ello una pelota muy elástica. Sin embargo, no fue en España donde se plantearía su uso como goma de borrar. En Inglaterra el científico Joseph Priestley observó como al frotar un trozo de caucho sobre un trazo de lápiz este se borraba del papel. A pesar de su descubrimiento, el científico inglés no comercializó el producto, siendo el ingeniero Edwar Nairne quien empezó a comercializar en su tienda de Londres bloques de caucho como borradores, era el año 1770 y según Nairne, descubrió este uso cuando confundió un bloque de caucho con una goma demigajón.
La piedra de Rosetta es un fragmento de una antigua estela egipcia de granodiorita inscrita con un decreto publicado en Menfis en el año 196 a. C. en nombre del faraón Ptolomeo V. La piedra fue descubierta en Port Saint Julien, el-Rashid (Rosetta), en el delta del Nilo en Egipto en 1799 EC por Pierre François Xabier Bouchard. Bouchard era un oficial de ingenieros del ejército de Napoleón, y extrajo la piedra de una vieja pared que estaban demoliendo como parte de los trabajos de construcción del fuerte Julien. El comandante de Bouchard, un tal General Menou, cuando se dió cuenta de su importancia, hizo mandar la piedra a Alejandría. Se hicieron moldes y copias, pero más tarde el general británico Tomkins Turner se hizo con la piedra, con lo que el artefacto acabó por encontrar un hogar permanente en el Museo Británico de Londres. La piedra mide 112,3 por 75,7 cm y tiene 28,4 cm de espesor. El texto de la piedra consta de un texto jeroglífico de 14 líneas, uno demótico de 32 líneas y uno griego de 54 líneas.
Reinaldo Pulido, vicepresidente del Consejo Superior de Turismo (Conseturismo), abogó por incrementar la conectividad del país hacia distintos destinos turísticos, en especial hacia Estados Unidos por su importancia para el desarrollo del sector. “Ese es el logro que hemos visto este año, que hemos podido conectarnos con Colombia, poco a poco; pero falta conectarte con Brasil, con Suramérica, México y Estados Unidos (EE. UU). La conexión con EE. UU. era realmente importante, era un intercambio cultural, generacional y económico”, aseveró Pulido. Además, el especialista enfatizó en que “creemos que hay que sacar de esta diatriba política a todos estos temas. Las operaciones aéreas no son nada más para las cosas bonitas, es una necesidad importante, un derecho que tenemos nosotros de movilizarnos”, reseñó Unión Radio en su página web. En cuanto a los números de ocupación en el ramo hotelero en el presente año, el vicepresidente de Conseturismo argumentó que se mantuvo entre el 30 % y el 35 % en todo el país, aclarando que hubo hoteles y sitios de hospedajes que tuvieron más cobertura que otros dependiendo de las fechas. Sin embargo, se mostró preocupado por ese otro 65 % que sigue siendo casi las dos terceras partes del total de ocupación que no se está aprovechando. “No es que va mal, venimos de cero porque venimos de 2 años de pandemia (…) en este año empezamos a ver cierto crecimiento, es lento, pero es sostenido”, dijo. También reveló que ninguno de los feriados alcanzó lo esperado por Conseturismo, refiriéndose a las festividades de Carnaval, Semana Santa, vacaciones escolares y muchas otros celebraciones en las regiones en todo el país, como lo es la Feria de La Chinita en Maracaibo y el día de la Divina Pastora en Barquisimeto. Pulido apostó por promover la buena atención en los hoteles, las reparaciones a las posadas, aeropuertos, terminales y la promoción de los espacios públicos naturales. Forma parte de nuestros canales y mantente informado del acontecer Empresarial de Venezuela y Latinoamérica Telegram: https://t.me/mscnoticias Linkedin: https://www.linkedin.com/groups/8278559/