Sábado 29 y domingo 30 de junio
Esta querida agrupación ofrece un espectáculo en el Centro Cultural BOD donde, además de reencontrarse con el público citadino, hará un recorrido por el repertorio que la ha convertido en referencia mundial de las nuevas sonoridades de nuestra música instrumental contemporánea de raíz tradicional.
Ensamble Gurrufío anuncia la apertura de una nueva función del espectáculo 35 años de música venezolana… El Reencuentro.
Serán dos fechas para que el público pueda festejar junto a Cheo Hurtado, David Peña, Luis Julio Toro y Juan Ernesto Laya, sus integrantes, más de tres décadas de un itinerario lleno de grandes momentos y logros, en un espectáculo íntimo que el sábado 29 y domingo 30 de junio, a las 5:00 p.m. y 11:30 a.m., respectivamente., llenará de buena música la sala de conciertos del Centro Cultural BOD.
Lo mejor del repertorio de esta agrupación será interpretado en vivo en dos presentaciones que estarán marcadas por el regocijo, la alegría y una festiva atmósfera por el reencuentro con la audiencia y entre sus integrantes, quienes por distintas razones no habían tocado juntos en Venezuela desde 2013.
Tradición y Modernidad
Largo ha sido el camino que ha transitado este grupo que, gestado en el intenso ambiente artístico de la Caracas de mediados de los ochenta, se fue transformando en plural y colectivo cimiento del patrimonio sonoro de Venezuela.
Merecedor de prestigiosos premios y reconocimientos, Ensamble Gurrufío es hoy uno de los grupos venezolanos de mayor trayectoria internacional, referencia mundial de excelencia y virtuosismo gracias a la fluida integración de lo popular con elementos contemporáneos que ha dado forma a un estilo, que es su sello, y que lo ha convertido en una versátil propuesta que explora y reinterpreta los elementos universales y modernos de nuestro vivo acervo musical.
A lo largo de su exitosa trayectoria ha llevado nuestra música instrumental a los más diversos lugares del mundo, sumando ya presentaciones en casi ochenta países y en teatros de tanto prestigio como el Carnegie Hall de Nueva York, el Barbican Center de Londres o el Concert Hall de El Cairo.
Sus producciones discográficas Maroa (1993), El Cruzao (1994), El Trabadedos (1996), Cosas del ayer (1998), En Vivo (1998), Gurrufío y Orquesta (1999), Serenata con Gurrufío (2001), Sesiones con Moisés Torrealba (2002) y Cancionero Infantil Venezolano (2006), Sesiones con Alfredo Naranjo (2009), Sesiones con Hamilton de Holanda (2010), así como Camerata Criolla en vivo y El reto: La leyenda de Florentino y el Diablo, suman más de 150 mil copias vendidas y son ganadoras de discos de Oro y Platino, lo que confirma la receptividad de su propuesta.
Sus espectáculos, aplaudidos por público y crítica, dejan entrever una direccionalidad que tiende a universalizar el sentido polirrítmico e integrador de Venezuela, según ha dicho la crítica internacional.
El respeto a la diversidad y la apertura hacia los aportes de cada integrante que internamente define a Gurrufío, es otro de los secretos de su éxito. “Siempre buscamos distinguir el valor que en si posee cada género o forma musical que abordamos para, en ese reconocimiento, explorar sus matices y difundir su riqueza como algo muy nuestro, sin perder la esencia del discurso musical”, afirman.
Esto también es notorio en su orquesta, Camerata Criolla, orquesta de cámara que une a algunos de los mejores músicos de formación académica del país con otros de arraigo popular, para explorar, en formato sinfónico, nuestros géneros musicales a través de la ejecución de composiciones de autores contemporáneos.
En 2019, el relato de la búsqueda de este flexible ensamble proyecta renovadas vías en la celebración de sus treinta y cinco años, ciclo que comenzó en agosto de 2018 con el reencuentro de sus integrantes originales en Francia y España.
Conciertos en el exterior y en otras ciudades del país, conjugando conciertos y el taller “Aprende y toca con Ensamble Gurrufío”, son algunas de las actividades que anuncia para los próximos meses.
Los amantes de la música venezolana están invitados a esta festiva celebración aniversario en el Centro Cultural BOD, que cuenta con el patrocinio de Telefónica Movistar, Laser Airlines, Seguros Universitas, Banco Occidental de Descuento, Circuito Onda y El Nacional, entre otros aliados.
Las entradas para las dos funciones de Ensamble Gurrufío: 35 años de música venezolana… El Reencuentro, están disponibles en las taquillas Centro Cultural BOD, en La Castellana, de lunes a domingo de 10:00 a.m. a 5:00 p.m. También pueden adquirirse a través de las taquillas externas y plataforma web de ticketmundo.com.
Más información en Twitter: @EnsambGurrufio y Instagram: @EnsambleGurrufio.Ofc
El sombrero, más que una simple prenda de vestir, ha sido un accesorio esencial a lo largo de la historia, con funciones que van desde la protección contra el clima hasta el reflejo de la identidad cultural. Compuesto por una copa y un ala que la rodea, su versatilidad lo ha convertido en un objeto emblemático. Se estima que su origen se remonta al Antiguo Egipto, donde los tocados reflejaban el estatus social. En la antigua Grecia, el gorro frigio era símbolo de libertad para los esclavos liberados. Otros diseños destacados fueron el píleo (Pilleus), una pieza ajustada sin ala, y el pétaso (Petasus), reconocido como el primer sombrero con ala, ideal para protegerse del sol durante los viajes. Con el paso de los siglos, el sombrero ha evolucionado no solo en materiales y estilos, sino también en su significado. Ha pasado de ser una herramienta de necesidad a un elemento de moda, adoptado en diversas culturas y épocas. Hoy en día, los sombreros no solo se asocian con la funcionalidad, sino que también son un símbolo de elegancia y personalidad, adaptándose a las tendencias contemporáneas sin perder su esencia histórica. https://www.tiktok.com/@mscnoticias
La celebración del Espíritu de la Navidad es una tradición que combina elementos espirituales y culturales, especialmente popular en varios países de América Latina y algunas partes de Europa. Esta festividad ocurre el 21 de diciembre, coincidiendo con el solsticio de invierno en el hemisferio norte, marcando el día más corto y la noche más larga del año. Se considera un momento de reflexión, renovación y apertura para atraer energías positivas, armonía y prosperidad. Origen y significado Aunque no tiene un origen religioso específico, la celebración está vinculada al simbolismo de la luz que vence a la oscuridad, un concepto presente en muchas culturas. En esta fecha, se invita al Espíritu de la Navidad, una entidad simbólica asociada con la abundancia, el amor y la paz, a llenar los hogares con bendiciones. Rituales comunes Durante la noche del 21 de diciembre, las familias suelen reunirse para realizar rituales que promuevan la armonía y la prosperidad. Algunos de estos incluyen: Escribir deseos: Se escriben en papel los anhelos para el próximo año, tanto personales como colectivos. Limpiezas energéticas: Se realizan limpiezas en el hogar con incienso, velas aromáticas o aceites esenciales para atraer buenas energías. Cena especial: Se comparte una comida sencilla, generalmente vegetariana, en un ambiente de gratitud. Donaciones: Se fomenta el acto de dar, ya sea con regalos simbólicos o ayuda a quienes lo necesitan. Significado actual Hoy en día, el Espíritu de la Navidad es visto como una oportunidad para conectarse con lo esencial, reflexionar sobre el año que termina y proyectar intenciones positivas para el futuro. Más allá de las creencias personales, es una práctica que invita a valorar la gratitud, el amor y la generosidad como pilares para iniciar un nuevo ciclo. https://www.tiktok.com/@mscnoticias