Caracas.-La bella Urimar Torres desde siempre se enfocó en cumplir su sueño de ser bailarina profesional para compartir con los grandes de la música urbana, lo que la ha llevado a presentarse en los mejores escenarios de Caracas, Punta Cana y Lima.
Dio sus primeros pasos en el medio artístico como parte del grupo de animadoras de los equipos Panteras de Miranda y Atlético Venezuela.
“Desde los seis años descubrí mi pasión por el baile. He bailado con reconocidos artistas internacionales y eso es lo que quiero seguir haciendo a lo largo de mi carrera”, expresó la caraqueña.
A la par de su preparación universitaria, en la carrera de Estudios Internacionales en la UCV e inglés avanzado en el Centro Venezolano Americano, Urimar continuó su preparación en el mundo del baile en las academias Roxys y EDAV, esta última de la reconocida coreógrafa Anita Vivas.
Urimar ha bailado con artistas venezolanos de la talla de Diosa Canales, DJ Pana, Roger Sky, Fran Strippoli, Ab Music y El Duke. Así como también ha sido parte del crew de baile de artistas colombianos Ricardo López, El Indio y Kevin Roldán, y los puertorriqueños Luigi 21 Plus y Justin Quiles.
En 2017 decide emprender vuelo fuera de Venezuela y se muda a República Dominicana para formar parte del Ballet Euphoria, presentándose en hoteles de las cadenas Riu, Barcelo y Secret Cap Cana con shows de temáticas Burlesque, Las Vegas, American Way, Tropical, entre otros.
Llegó a ser bailarina oficial de la Discoteca Kviar en Punta Cana, mientras fue escogida como imagen del Exotic Art Calendar 2018.
Después de Dominicana se mudó a Perú, donde forma parte de la agrupación de bailarinas y cantantes “Las gatitas de la kumbia”. Actualmente, Urimar Torres es parte del Ballet Legendaris en un café teatro de la zona turística peruana Miraflores, producido por Juan Bojanich y Mario Carossi, espacio en el que tienen participación protagónica personajes de gran reconocimiento en el país, como Namin Timoyco, Los Chikiplunes y los comediantes Melcochita, Miguel Barraza y Dany Rosales.
En una fusión de historia, espiritualidad y tradición, el Jueves Santo emerge como un día crucial en el calendario litúrgico cristiano. En los relatos bíblicos de San Lucas, San Juan, San Marcos y San Mateo, se encuentran los pilares que sustentan esta conmemoración. La última cena, un simbolismo tan profundo como la fe misma, donde Jesús compartió un momento trascendental con sus 12 discípulos. Esta cena, conocida también como la Santa Cena, resonó con la tradición judía al incluir el cordero pascual, trazando así un puente entre el Antiguo y el Nuevo Testamento. En un gesto de profunda humildad, el lavatorio de los pies se erige como un acto de amor y servicio. Jesús, en un acto conmovedor, lavó los pies de sus discípulos, desafiando así las barreras sociales y enseñando la esencia del verdadero liderazgo. La narrativa bíblica también nos transporta al huerto de Getsemaní, donde Jesús, en un momento de angustia, buscó fuerza en la oración antes de enfrentar su destino. Este episodio conmueve por su humanidad y su conexión con las luchas espirituales de la humanidad. El arresto de Jesús a manos de Judas Iscariote sella el dramatismo de este día, marcando el inicio de los eventos que llevarían a la crucifixión y resurrección, pilares fundamentales de la fe cristiana. El Jueves Santo, marcado por su movilidad en el calendario, no se limita a una fecha fija, sino que se ajusta al ciclo lunar y estacional, subrayando así su conexión con los ritmos naturales y celestiales. En resumen, el Jueves Santo trasciende las páginas de la historia para impregnar nuestras vidas con su profundo significado espiritual. Desde la última cena hasta el arresto, este día nos invita a reflexionar sobre el amor, la humildad y la fortaleza en medio de la adversidad. ¡Cada momento cuenta en la narrativa del Jueves Santo! https://www.tiktok.com/@mscnoticias
El Domingo de Ramos es el día que marca el inicio de la Semana Santa en la tradición cristiana, conmemorando la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. Este día está lleno de simbolismo y significado religioso para los cristianos, pero en términos de “misterios”, podrían interpretarse algunos aspectos simbólicos o teológicos: La entrada triunfal de Jesús: Este evento, mencionado en los evangelios, es la base del Domingo de Ramos. Jesús entra en Jerusalén montado en un burro, mientras la multitud lo aclama y lo saluda con ramas de palma y ropas extendidas en su camino. El misterio aquí radica en la comprensión del significado de esta entrada en el contexto de la misión de Jesús y su relación con el reino de Dios. El cambio de actitud de la multitud: Es intrigante cómo la multitud que aclama a Jesús en su entrada triunfal el Domingo de Ramos luego se convierte en la misma multitud que lo rechaza y pide su crucifixión pocos días después. Este cambio repentino de actitud puede ser objeto de reflexión sobre la naturaleza humana y la fragilidad de las lealtades populares. El simbolismo de las palmas y las ramas: En muchas tradiciones cristianas, se llevan palmas y ramas durante las celebraciones del Domingo de Ramos como símbolo de victoria y triunfo. Estos elementos pueden representar la victoria espiritual sobre el pecado y la muerte que Jesús trae consigo, pero también pueden ser interpretados como un recordatorio de la naturaleza efímera de los triunfos terrenales. El comienzo de la Semana Santa: El Domingo de Ramos marca el inicio de la Semana Santa, un período de intensa reflexión y conmemoración para los cristianos. Este tiempo está lleno de rituales y tradiciones que recuerdan los eventos finales de la vida de Jesús, desde la Última Cena hasta su crucifixión y resurrección. Los misterios aquí son los propios misterios de la fe cristiana: la pasión, muerte y resurrección de Jesús, y su significado para la salvación de la humanidad. En resumen, el Domingo de Ramos está envuelto en una serie de misterios religiosos y simbolismos que invitan a la reflexión y la contemplación sobre la fe cristiana y el significado de la vida y la obra de Jesucristo. https://www.tiktok.com/@mscnoticias