Caracas, julio 2015.- El arte de hablar en público puede convertirse en una tragedia para una persona que no sepa cómo canalizar el miedo escénico. Para comunicarse con los clientes y motivar a los empleados, es necesario aprender a canalizar ese temor. A continuación Carelys Velázquez, diplomada en Oratoria brinda algunas recomendaciones para utilizar la ansiedad a tu favor ante una presentación.
• Infórmate: el conocimiento da poder, por lo que es necesario conocer qué factores intervienen en el miedo, para así comprender las reacciones mentales y biológicas que se manifiestan.
• Usa imágenes positivas: cada vez que a tu mente acudan imágenes negativas sobre tu presentación en público, voluntariamente crea imágenes positivas para contrarrestar su efecto y llenarte de endorfinas. No te compares con experiencias anteriores y mucho menos con las de terceros.
• Exprésate en positivo: habla en función de lo que deseas obtener y no de lo que deseas evitar.
• Visualiza: crea tu propia película mental, donde tú serás el protagonista, adopta el guion con éxito. Exagera los triunfos en tus películas, disfrútalo, siéntelo.
• Mira cómo lo hacen los otros: una forma de enfrentar los temores es observando el poder que nos atemoriza para así familiarizarnos con ellos. Observa a oradores en vivo, videos, TV y en todos los estilos.
• Habla en público: para aprender a hablar en público es necesario –obviamente– hablar en público. Sólo haciendo frente a nuestros temores podemos superarlos. Aprovecha los temas que te apasionen y transmite entusiasmo. El hecho de dominar el contenido es un punto a tu favor.
El sábado, 01 de agosto Velázquez se dictará en Caracas el Taller de Oratoria ¡Exprésate con confianza! en el que los participantes podrán abordar el tema de hablar en público y agendar sesiones posteriores de Coaching personalizadas.
Los interesados en formar parte de este taller pueden escribir a [email protected] o comunicarse a través de los números 04143960271/0167030155.
En una fusión de historia, espiritualidad y tradición, el Jueves Santo emerge como un día crucial en el calendario litúrgico cristiano. En los relatos bíblicos de San Lucas, San Juan, San Marcos y San Mateo, se encuentran los pilares que sustentan esta conmemoración. La última cena, un simbolismo tan profundo como la fe misma, donde Jesús compartió un momento trascendental con sus 12 discípulos. Esta cena, conocida también como la Santa Cena, resonó con la tradición judía al incluir el cordero pascual, trazando así un puente entre el Antiguo y el Nuevo Testamento. En un gesto de profunda humildad, el lavatorio de los pies se erige como un acto de amor y servicio. Jesús, en un acto conmovedor, lavó los pies de sus discípulos, desafiando así las barreras sociales y enseñando la esencia del verdadero liderazgo. La narrativa bíblica también nos transporta al huerto de Getsemaní, donde Jesús, en un momento de angustia, buscó fuerza en la oración antes de enfrentar su destino. Este episodio conmueve por su humanidad y su conexión con las luchas espirituales de la humanidad. El arresto de Jesús a manos de Judas Iscariote sella el dramatismo de este día, marcando el inicio de los eventos que llevarían a la crucifixión y resurrección, pilares fundamentales de la fe cristiana. El Jueves Santo, marcado por su movilidad en el calendario, no se limita a una fecha fija, sino que se ajusta al ciclo lunar y estacional, subrayando así su conexión con los ritmos naturales y celestiales. En resumen, el Jueves Santo trasciende las páginas de la historia para impregnar nuestras vidas con su profundo significado espiritual. Desde la última cena hasta el arresto, este día nos invita a reflexionar sobre el amor, la humildad y la fortaleza en medio de la adversidad. ¡Cada momento cuenta en la narrativa del Jueves Santo! https://www.tiktok.com/@mscnoticias
El Domingo de Ramos es el día que marca el inicio de la Semana Santa en la tradición cristiana, conmemorando la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. Este día está lleno de simbolismo y significado religioso para los cristianos, pero en términos de “misterios”, podrían interpretarse algunos aspectos simbólicos o teológicos: La entrada triunfal de Jesús: Este evento, mencionado en los evangelios, es la base del Domingo de Ramos. Jesús entra en Jerusalén montado en un burro, mientras la multitud lo aclama y lo saluda con ramas de palma y ropas extendidas en su camino. El misterio aquí radica en la comprensión del significado de esta entrada en el contexto de la misión de Jesús y su relación con el reino de Dios. El cambio de actitud de la multitud: Es intrigante cómo la multitud que aclama a Jesús en su entrada triunfal el Domingo de Ramos luego se convierte en la misma multitud que lo rechaza y pide su crucifixión pocos días después. Este cambio repentino de actitud puede ser objeto de reflexión sobre la naturaleza humana y la fragilidad de las lealtades populares. El simbolismo de las palmas y las ramas: En muchas tradiciones cristianas, se llevan palmas y ramas durante las celebraciones del Domingo de Ramos como símbolo de victoria y triunfo. Estos elementos pueden representar la victoria espiritual sobre el pecado y la muerte que Jesús trae consigo, pero también pueden ser interpretados como un recordatorio de la naturaleza efímera de los triunfos terrenales. El comienzo de la Semana Santa: El Domingo de Ramos marca el inicio de la Semana Santa, un período de intensa reflexión y conmemoración para los cristianos. Este tiempo está lleno de rituales y tradiciones que recuerdan los eventos finales de la vida de Jesús, desde la Última Cena hasta su crucifixión y resurrección. Los misterios aquí son los propios misterios de la fe cristiana: la pasión, muerte y resurrección de Jesús, y su significado para la salvación de la humanidad. En resumen, el Domingo de Ramos está envuelto en una serie de misterios religiosos y simbolismos que invitan a la reflexión y la contemplación sobre la fe cristiana y el significado de la vida y la obra de Jesucristo. https://www.tiktok.com/@mscnoticias