Bajo la premisa de que “el futuro cambia y los seguros también”, Seguros Bolívar cambió de nombre estrenándose en el mercado venezolano bajo la razón social de Atrio Seguros.
Un grupo de inversionistas, al frente de Rafael Cedeño en la Presidencia, conocido empresario del área de la construcción, Jacqueline Rodríguez, profesional con más de 30 años de experiencia en el mercado asegurador a cargo de la Vicepresidencia Ejecutiva, quienes junto a Simón Chocrón, Jesús Eduardo Chong y Norelis Carmona, con amplia trayectoria en el área, conforman la Junta Directiva de la nueva empresa de capital 100% nacional y con un personal seleccionado entre los mejores en sus especialidades.
En sus comienzos Seguros Bolívar solo atendía Pólizas de Vida, ahora con dicho cambio, Atrio Seguros tiene un amplio portafolio comercial capaz de cubrir necesidades en el ramo de Automóvil, Personas, Fianzas y Patrimoniales.
La visión estratégica de Atrio Seguros permitirá cumplir con compromisos tales como la comercialización de planes de Vida y/o Pensiones que sin duda, combatirá el actual desestímulo al ahorro producto de la inflación y permitirá innovar en el ofrecimiento de los productos del ramo asegurador presentando atractivas combinaciones de coberturas, plazos y costos para hacerlos accesibles a cualquier bolsillo.
La idea es llevar el servicio Post Venta a un nuevo nivel con la implementación y aprovechamiento de modernas tecnologías 2.0 que harán más fluida y cercana la relación con los clientes e impulsarán las relaciones con las Sociedades de Corretaje, Corredores y Agentes de Seguros brindándoles las más efectivas y oportunas herramientas que se traducirán en comodidad y eficiencia para todos.
Luego de la apertura en la Capital de la República la empresa desarrollará un plan de expansión a 2 meses que la llevará a estar presente, a través de sucursales, en ciudades como Valencia, Maracay y Maracaibo, y durante el resto del año en Puerto La Cruz y San Cristóbal.
La Organización de las Naciones Unidas proclama el 18 de septiembre como Día Internacional de la Igualdad Salarial, con la finalidad de resaltar la importancia de equipar la igualdad salarial por un trabajo de igual valor. La igualdad salarial o igualdad de remuneración se refiere al derecho de hombres y mujeres a recibir una remuneración equitativa por trabajos de igual valor. Este concepto considera factores como competencias, condiciones laborales, calificaciones y niveles de responsabilidad en el desempeño del puesto. Además, la igualdad salarial refuerza los derechos humanos y la igualdad de género, y cuenta con el respaldo de actores clave como la comunidad internacional, la sociedad civil, agencias de ONU Mujeres, los Estados Miembros y la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Como antecedente histórico, tras la Segunda Guerra Mundial, en 1951 se estableció el Convenio sobre Igualdad de Remuneración, reconocido como el primer instrumento internacional que impulsó la incorporación masiva de las mujeres al mundo laboral, ocupando posiciones en la primera línea de producción en varios países. La creación de este convenio surgió como respuesta a la desigualdad salarial, vista como una clara forma de discriminación laboral. Este hito marcó el comienzo de un avance significativo hacia una mayor igualdad de género en el mercado laboral, estableciendo las bases para eliminar brechas económicas y promover un entorno laboral más justo e inclusivo. https://www.tiktok.com/@mscnoticias
La leyenda de Rómulo y Remo narra la historia de los fundadores míticos de Roma. Según el relato, Ascanio, hijo del héroe troyano Eneas, estableció la ciudad de Alba Longa a orillas del río Tíber. A lo largo de los años, sus descendientes reinaron sobre esta ciudad, hasta llegar a Numitor y su hermano Amulio. Amulio destronó a Numitor y, para evitar que tuviera descendencia que reclamara el trono, obligó a su hija, Rea Silvia, a convertirse en sacerdotisa de la diosa Vesta, asegurando así su virginidad. Sin embargo, Marte, el dios de la guerra, se unió a Rea Silvia, quien dio a luz a los gemelos Rómulo y Remo. Temiendo por su vida, Amulio ordenó que los recién nacidos fueran arrojados al Tíber en una canasta. La corriente los llevó hasta la zona de las siete colinas, cerca de la desembocadura del Tíber. Allí, una loba llamada Luperca los descubrió mientras bebía agua. Ella los llevó a su guarida en el Monte Palatino y los amamantó hasta que un pastor los encontró. El pastor y su esposa criaron a los mellizos, quienes al llegar a la adultez restauraron a Numitor en el trono de Alba Longa. Rómulo y Remo decidieron fundar una nueva ciudad como colonia de Alba Longa en el lugar donde la loba los había protegido. Así nació Roma, con Rómulo y Remo como sus primeros reyes. El mito de la loba que amamantó a los gemelos ha sido objeto de diversas interpretaciones. Algunos creen que la loba fue en realidad una mujer que cuidó de ellos, ya que el término latino “lupa” también se usaba para referirse despectivamente a las prostitutas de la época. Este relato, cargado de simbolismo, es fundamental para entender el origen mítico de una de las civilizaciones más influyentes de la historia. https://www.tiktok.com/@mscnoticias