aniel Martínez Pérez – PRENSA ATLÉTICO VENEZUELA CF (@AtleticoVzla)
Es muy difícil hablar de Nerio Hernández sin repasar su historia y todo lo que ha brindado al fútbol venezolano. Se necesitarían páginas y páginas enteras para reseñar todos los detalles (ninguno sin dejar de ser importante) de la vida y obra de un hombre que debe ser elevado pronto al Olimpo del balompié nacional. Aquí se hará el esfuerzo de reseñar la importancia del trabajo que hoy el conocido y linajudo ex jugador y técnico cumple al frente de Atlético Venezuela.
Un técnico asistente
Baudelio Hernández (el “Nerio” es un apodo) tiene en su espalda una destacada trayectoria en el fútbol, cargada de ingentes momentos inolvidables. Desde que dejara su natal España y se radicara en Venezuela, a punta de trabajo y sacrificio se ha labrado un importante nombre. En la faceta de técnico, donde alcanzó sus más grandes logros, sigue siendo una figura indiscutible que hoy presta toda su sapiencia y conocimiento al servicio del cuadro nacional.
“Soy el segundo entrenador del equipo. Ayudo a José (Hernández) en todo lo que pueda y trabajo para mejorar lo que hacemos”, dice tajante de entrada, cual patriarca, el bueno de Nerio, sin ningún atisbo de revelación de que entre el técnico de Atlético Venezuela y él existe una relación que corre por la sangre. Es el asistente de su hijo.
Su labor dentro del equipo es notable. Tiene 78 años de vida, con más de 45 dedicados exclusivamente a la dirección técnica. Nadie puede osar de poner en discusión la experiencia de un hombre templario, que no deja de dar siempre un consejo a cada jugador e incluso, tomar decisiones sobre el juego. “Con tantos años, algo me queda y todo eso se lo puedo transmitir a José (Hernández). Es importante la experiencia, es un elemento necesario para que hoy estemos consiguiendo algo positivo en un equipo que tiene poco tiempo”, asegura el chicharrero, como se le denomina a los nativos de la hermosa isla canaria de Tenerife.
El trabajo es su vida
Nerio Hernández cumple un rol que lo mantiene activo, vigente y a gusto. Por eso y para eso trabaja en Atlético. “Esto es lo que me agrada. Tenemos que tener el entendimiento de los jugadores, que sepan qué es lo que queremos de ellos. Que los trabajos son para que ellos mejoren y así también el fútbol venezolano”, explica, aprobando su gestión en el equipo, en el que acompaña a José Hernández desde la época en que el equipo estaba en Segunda División dos años atrás.
“Hemos tenido dificultades con las lesiones por ejemplo, pero el día a día nos va a decir dónde podemos llegar con el trabajo”, revela confiado quien ha ocupado 28 banquillos en su larga trayectoria. “En Atlético Venezuela nos ha ido bien. Mientras tenga salud y trabajo, aportaré mis ideas y mi compromiso”.
En Atlético ha coincidido con jugadores que ya le conocían, al tiempo que ayuda en la formación de otros más nóveles. “Muchos ya me conocían, como David McIntosh que lo saqué con 17 años y así como él, a una barbaridad de jugadores del fútbol nacional”, dice orgulloso quien quiere continuar formando futbolistas bajo su idea: “Quiero inculcarles la constancia del trabajo y transmitirles que hay que mejorar siempre. Ellos están conscientes que lo que uno hace acá es por el bien de ellos”, expresa.
Formando para la excelencia
Nerio tiene una premisa que lleva su firma, más allá de que el tiempo ha pasado y con él, las transformaciones en el balompié: “El fútbol cambió, el trabajo cambió, las ideas cambiaron. Pero sigo insistiendo que el cansancio sale con el trabajo. Cuando hay un receso en las prácticas les digo a los muchachos que no se pueden sentar, tienen que recuperar caminando, haciendo otra cosa”, revela un obsesivo del trabajo bien hecho.
“Yo manejé a los uruguayos Ildo Maneiro que fue campeón de Libertadores y Pierino Lattuada que jugó en la Selección de Uruguay y a ellos les gustaba mi disciplina y mi trabajo”, cuenta orondo el asistente técnico, demostrando que la excelencia se alcanza sólo con el buen trabajo y la seriedad con que se le tome, siendo además un enamorado de la integralidad en el fútbol: “Los jugadores verán que los triunfos vienen solos si hay equilibrio entre la técnica y la preparación física bien trabajada. Con la velocidad, anticipación y potencia un equipo puede ser superior a uno mejor técnicamente”.
A Nerio Hernández se le nota en el rostro la mella de luchar por un buen fútbol, pero no se agota de seguir aportando. “Hay ocasiones en las que uno se cansa pero tengo tantos años en esto, jugué fútbol toda mi vida, nací detrás de un estadio, que si tengo aún fuerzas para transmitir consejos y trabajar con los muchachos, de poner mi grano de arena, no dejaré de hacerlo”, señala sin titubear el gran Baudelio, el viejo Nerio, el maestro cuyo legado permanece vigente y del cual Atlético Venezuela aprovecha para, siempre, ir por más.
PRENSA – ATLÉTICO VENEZUELA CF
La Semana Santa, más que un feriado, es un período cargado de tradiciones arraigadas que invitan a la reflexión y la renovación espiritual. Una de estas prácticas significativas es la visita a los siete templos, una experiencia que trasciende la mera observancia para sumergirse en un profundo acto de devoción y conexión con la historia bíblica. La tradición, que se inicia la noche del Jueves Santo y culmina en la mañana del Viernes Santo, tiene sus raíces en Roma gracias a San Felipe Neri, y desde entonces ha reverberado en todo el mundo, convirtiéndose en un símbolo de respeto hacia Jesús y su sacrificio por la humanidad. Según la enseñanza de la Iglesia Católica, el Jueves Santo marca un momento crucial en la historia cristiana: la Última Cena de Jesús con sus apóstoles, donde instituyó los sacramentos de la Eucaristía y el Orden Sacerdotal. Este acto simboliza el inicio de un camino hacia la redención, hacia la reconciliación con el prójimo y la interiorización de los valores de caridad promovidos por Jesús. Al recorrer los siete templos, los fieles no solo están siguiendo los pasos físicos de Jesús desde su captura hasta su crucifixión, sino que están participando en un acto de comunión espiritual, acompañando al Salvador en su trayectoria hacia el sacrificio y la resurrección. Cada uno de los siete templos representa una etapa crucial en este recorrido espiritual: Desde el Cenáculo hasta el huerto de Getsemaní, donde Jesús oró y sudó sangre. Desde el huerto de Getsemaní hasta la casa de Anás, donde fue interrogado y maltratado. Desde la casa de Caifás hasta la primera comparecencia ante Poncio Pilatos, donde fue acusado injustamente. Desde la confrontación con Herodes hasta la segunda comparecencia ante Pilatos, donde fue sentenciado a muerte. Finalmente, desde la casa de Pilatos hasta el Monte Calvario, donde Jesús cargó con la cruz, fue crucificado y sepultado. Cada estación de este camino sagrado invita a los creyentes a reflexionar sobre el significado más profundo de la Pasión de Cristo y a renovar su compromiso con los valores cristianos de amor, perdón y redención. La visita a los siete templos se convierte así en una experiencia transformadora que trasciende las fronteras del tiempo y el espacio, guiando a los fieles hacia una conexión más íntima con su fe y su salvación. https://www.tiktok.com/@mscnoticias
El Domingo de Ramos es el día que marca el inicio de la Semana Santa en la tradición cristiana, conmemorando la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. Este día está lleno de simbolismo y significado religioso para los cristianos, pero en términos de “misterios”, podrían interpretarse algunos aspectos simbólicos o teológicos: La entrada triunfal de Jesús: Este evento, mencionado en los evangelios, es la base del Domingo de Ramos. Jesús entra en Jerusalén montado en un burro, mientras la multitud lo aclama y lo saluda con ramas de palma y ropas extendidas en su camino. El misterio aquí radica en la comprensión del significado de esta entrada en el contexto de la misión de Jesús y su relación con el reino de Dios. El cambio de actitud de la multitud: Es intrigante cómo la multitud que aclama a Jesús en su entrada triunfal el Domingo de Ramos luego se convierte en la misma multitud que lo rechaza y pide su crucifixión pocos días después. Este cambio repentino de actitud puede ser objeto de reflexión sobre la naturaleza humana y la fragilidad de las lealtades populares. El simbolismo de las palmas y las ramas: En muchas tradiciones cristianas, se llevan palmas y ramas durante las celebraciones del Domingo de Ramos como símbolo de victoria y triunfo. Estos elementos pueden representar la victoria espiritual sobre el pecado y la muerte que Jesús trae consigo, pero también pueden ser interpretados como un recordatorio de la naturaleza efímera de los triunfos terrenales. El comienzo de la Semana Santa: El Domingo de Ramos marca el inicio de la Semana Santa, un período de intensa reflexión y conmemoración para los cristianos. Este tiempo está lleno de rituales y tradiciones que recuerdan los eventos finales de la vida de Jesús, desde la Última Cena hasta su crucifixión y resurrección. Los misterios aquí son los propios misterios de la fe cristiana: la pasión, muerte y resurrección de Jesús, y su significado para la salvación de la humanidad. En resumen, el Domingo de Ramos está envuelto en una serie de misterios religiosos y simbolismos que invitan a la reflexión y la contemplación sobre la fe cristiana y el significado de la vida y la obra de Jesucristo. https://www.tiktok.com/@mscnoticias