La historia de un venezolano que revolucionó el mundo de los restaurantes
El pasado jueves 20 de julio en el restaurant Menta & Romero (Altamira Village), el empresario Álvaro Pérez Miranda presento su libro Mi camino a Japón, la historia de un venezolano que revolucionó el mundo de los restaurantes.
Se trata del relato sincero y profundo de un hombre que a los 17 años decidió emigrar por sus propios medios de su Venezuela natal buscando ampliar sus horizontes, hasta convertirse en un exitoso empresario del mundo de la hostelería a nivel internacional, que ha dirigido más de 70 proyectos gastronómicos, y un reconocido art dealer que habla cuatro idiomas y maneja su propia galería de arte, Black Ship Art Gallery.
El evento fue un conversatorio dirigido por la periodista Aymara Lorenzo donde el autor compartio con el público y los medios presentes sus experiencias personales y profesionales a lo largo de un proceso de aprendizaje emprendido durante varias décadas de carrera en Los Ángeles, Florencia, Tokio, New York y Miami. En marzo pasado, Pérez Miranda fue nombrado «Embajador de buena voluntad para la cocina japonesa», reconocimiento que recibió de manos del excelentísimo cónsul de Japón en Miami, Kazuhiro Nakai, convirtiéndose en el primer venezolano y latino en merecer esa distinción.
Desde que concibió la idea de compartir su historia personal y profesional en un libro, el autor —que ahora reside en Miami— se propuso, antes que nada, presentarlo formalmente en Venezuela. «Me anima muy especialmente que mis hermanos venezolanos al conocerla, si es posible, encuentren ese rayo de luz que hace falta para encender la esperanza y alumbrar todas esas capacidades naturales que el país nos regala por el simple hecho de haber nacido en su tierra y habernos criado en su suelo», ha dicho Pérez Miranda.
Mi camino a Japón es una historia llena de resiliencia que detalla un camino de retos cumplidos, pero también de reveses de un hombre decidido a superarse. Un testimonio que en todo momento rinde homenaje a la cultura japonesa y busca motivar a todo el que crea que no es posible cumplir los sueños. «Muchos piensan que estoy mal de la cabeza porque sueño con regresar a Venezuela justo cuando seis millones de nosotros han huido del país tratando de escapar del hambre, de la violencia, la persecución, el maltrato y la falta de oportunidades —dice el autor—, pero a mí me ata la esperanza y también la satisfacción de haber podido comprobar, después de recorrer medio mundo, que quiero volver a este hermoso país que me dio la vida, y que es mi deber hacer lo que esté en mis manos para contribuir a que el país salga adelante. Algunos dirán que estoy loco o que soy un iluso soñador, y está bien. Si no fuera así, jamás hubiera salido de San Blas decidido a conquistar el mundo».
Según el autor, otro de los propósitos del libro es honrar uno de los principios sagrados que rigen la cultura japonesa. «Cuando has alcanzado tus metas y has logrado destacar en lo que haces aportando con tu trabajo al bienestar colectivo—dice—, es prácticamente una obligación moral que, en la medida de lo posible, se lo devuelvas a la sociedad, que enseñes a otros algo de lo mucho que has aprendido. Esta es una de las cosas más importantes que me ha dejado la cultura japonesa. Por otra parte, no me canso de decir en todas partes donde voy, que esa hospitalidad nata que tuve desde siempre, y que me hizo destacar en todo lo que he hecho hasta ahora, no es una virtud o un don aislado; es algo que está sembrado en el venezolano, algo que prácticamente viene en su ADN y que lo hace único y especial, receptivo, siempre dispuesto a ofrecer y compartir un cafecito, así sea lo único que tiene para dar; y lo hace con nobleza, desinteresadamente, con alegría y con amor, tanto en una gran ciudad como en cualquier pueblito recóndito del interior del país. Este libro es especialmente inspirado en ese venezolano».
La producción editorial de Mi camino a Japón estuvo a cargo de la agencia de servicios editoriales MEL Projects Publishing & Entertainment, dirigida por la periodista y escritora venezolana María Elena Lavaud, reconocida por su calidad como miembro de la Asociación Internacional de Autores Independientes (ALLI).
Sri Sri Ravi Shankar: Un legado de paz reconocido por la UNESCO Sri Sri Ravi Shankar, maestro espiritual indio nacido el 13 de mayo de 1956, es reconocido globalmente como embajador de paz y líder humanitario. Su filosofía, basada en la armonía y la meditación, ha inspirado a millones, y la UNESCO lo nombró uno de los oradores más destacados del siglo por su capacidad para unir culturas mediante el diálogo. Fundador de la Fundación Art of Living, Shankar ha liderado iniciativas en más de 150 países, enfocadas en reducir el estrés, promover la educación y fomentar la cohesión social. Sus programas de respiración y mindfulness son herramientas clave en comunidades afectadas por conflictos, logrando impactos tangibles en zonas postguerra y desastres naturales. La UNESCO destaca su habilidad para integrar ciencia y espiritualidad, demostrando cómo la paz interior transforma realidades externas. En entrevistas, Shankar asegura que “la verdadera prosperidad surge cuando el bienestar individual y colectivo se alinean”, una idea que resuena en contextos empresariales y sociales. Su enfoque en la educación emocional y la sostenibilidad ha sido adoptado por gobiernos y empresas, incluyendo proyectos de agricultura regenerativa y programas contra la adicción. En Venezuela, su mensaje de resiliencia y unidad cobra relevancia ante crisis complejas, ofreciendo un modelo para la reconstrucción social y económica. Shankar no solo enseña paz, sino que la construye: desde mediaciones en conflictos étnicos hasta campañas ambientales, su legado trasciende fronteras. https://www.tiktok.com/@mscnoticias?lang=es
Con más de 13.000 años extinto, el lobo gigante renace en laboratorio como el primer caso exitoso de desextinción, gracias a la edición genética avanzada de Colossal Biosciences. Colossal Biosciences ha alcanzado un hito sin precedentes al presentar tres cachorros que combinan el ADN del lobo gris moderno con variantes genéticas del lobo gigante, especie desaparecida hace más de 13 000 años. Tras recuperar ADN fósil en 2021, el equipo identificó 20 genes clave asociados a mayor tamaño, densidad de pelaje y robustez ósea. Utilizando CRISPR, editaron células de lobo gris para crear embriones implantados en madres sustitutas caninas, dando lugar a Rómulo, Remo y Khaleesi, dos machos de seis meses y una hembra de dos meses, respectivamente. La directora científica de Colossal, Beth Shapiro, calificó a estas crías como “el primer caso de éxito de desextinción. Estamos creando copias funcionales de algo que solía estar vivo”, declaró en una reciente entrevista. Aunque los ejemplares permanecerán en cautiverio, este avance tecnológico podría aplicarse para proteger especies aún vivas, como el lobo rojo, en peligro crítico y limitado a Carolina del Norte. Este proyecto no solo desafía los límites de la biología sintética, sino que también plantea preguntas éticas sobre el bienestar animal y la conservación. Mientras algunos expertos abogan por protocolos rigurosos y marcos regulatorios que garanticen la responsabilidad ecológica, otros ven en la desextinción una herramienta para restaurar dinámicas de ecosistemas perdidos. De prosperar, la reintroducción de estos lobos podría revitalizar hábitats y equilibrar poblaciones de presas. Sin embargo, su éxito dependerá de evaluaciones de comportamiento en semilibertad y de la capacidad de estos animales para adaptarse a entornos naturales. Fuentes consultadas: Colossal Biosciences (2025). Press Release: First Giant Wolf Cubs. https://www.tiktok.com/@mscnoticias?lang=es