Efectos psicológicos y fisiológicos de los tonos
Desde tiempos remotos en Egipto y la India, se ha utilizado el color como métodos de sanación o curación y en los años 60 con la creación de la cromoterapia que se utiliza hasta la actualidad, se han realizado estudios que concluyen que los colores producen en el ser humano reacciones a nivel psicológico y fisiológico; adicionalmente, han demostrado que el color puede ser utilizado en la curación de determinados padecimientos físicos.
Es por esto que el doctor en Medicina Alternativa de la Universidad Internacional para la Medicina Complementaria de La India, Dr. José Manuel Rizzo explica cómo cada color se puede utilizar como una herramienta para la vida diaria a través de sus efectos directos, como lograr que un ambiente sea alegre o sombrío, frío o cálido y también los indirectos, que son los relacionados con los afectos y las asociaciones que hacen las personas al estar frente a los colores e interactuar con ellos.
Un color para cada sensación
Pero cuales son las reacciones de cada color en las personas, es lo que Rizzo detalla a continuación: “El rojo está asociado con los impulsos, el peligro y la pasión. Puede elevar la tensión arterial, acelerar las palpitaciones, respiración, estimula actitudes agresivas o coléricas; al igual que, puede activar la circulación, la vitalidad, la acción e influencia sobre el humor de los seres humanos. La utilización del color rojo en una habitación puede generar irritabilidad, ansiedad y agobio”, señala el galeno.
Sobre el verde indica que tiene propiedades sedativas en casos de sobre excitación nerviosa; también es beneficioso, para mejorar el insomnio, la fatiga, neuralgias, dolor de cabeza, presión sanguínea alta, reforzar la vista, genera seguridad y esperanza. En los ambientes, el color verde influencia al hombre hacia la sensación de frescura, humedad y favorece la paciencia.
“El color azul está relacionado con la comunicación, se dice que produce un efecto tónico, calma las emociones, da paz, tranquilidad, es antiséptico, antifebril, astringente. Además, tiene propiedades para desintegrar energías negativas o discordantes; favorece la amabilidad y la serenidad. Es ideal su utilización para el cuarto de los niños, pero en otros ambientes la sobreexposición al mismo puede generar depresión o fatiga” indica el Dr. José Manuel Rizzo.
El color Blanco por su parte está relacionado a la paz, la pureza, la espiritualidad, la alegría, la pulcritud, estimula la humildad y la espiritualidad creativa. Es la fusión de todos los colores y la presencia de la luz, de la divinidad, el más allá y del renacer. El color blanco en los ambientes, se usa en grandes cantidades sin sobrecargarlos, dando luminosidad y amplitud absoluta, modernidad y frescura.
Sobre el color negro dice que se relaciona con la oscuridad, la formalidad, el dolor, la solemnidad, la tristeza. Tradicionalmente, se asocia con el poder, el misterio, la elegancia en el vestir, pero no es recomendable usarlo bajo estados ansiosos o depresivos. La utilización del negro en grandes cantidades puede generar agobio pues absorbe toda la luz. Es recomendable, utilizarlo tanto en espacios como en accesorios y detalles en pequeñas cantidades.
El Dr. Rizzo indica que el color anaranjado se relaciona con el equilibrio, la seguridad y la confianza. Disminuye la fatiga, estimula el sistema respiratorio, la vitalidad, la diversión, el movimiento, la pasión y el optimismo. El anaranjado favorece el trabajo en equipo, la unión, la conversación, ideal para reuniones familiares o corporativas. Es un color que abre el apetito y genera movimiento, genial para lugares de comida rápida.
A vestirse de amarillo
El amarillo genera buen humor y alegría. Es un color que energiza, que actúa sobre el sistema nervioso, digestivo, músculos, y, se le atribuyen cualidades relacionadas con el despertar intelectual, la inspiración creativa y la actividad mental. También, el amarillo claro es utilizado en el tratamiento de la psiconeurosis por sus propiedades de calmar los estados de excitación nerviosa.
“El vestirse de color amarillo, es recomendable cuando estamos en climas fríos, también es apropiado para los accesos de salones sociales, cuartos de estudio o reuniones; evitando por supuesto, el color amarillo intenso que da una sensación de informalidad.
Aprendido el efecto generado por cada color conviene analizar desde la vestimenta hasta las paredes de la casa para detectar los diferentes cambios de ánimo y corregir conductas inadecuadas. Para saber más al respecto se puede visitar la página web www.josemanuelrizzo.com o el blog www.josemanuelrizzo.blogspot.com o contactarlo al correo: [email protected]
La Semana Santa, más que un feriado, es un período cargado de tradiciones arraigadas que invitan a la reflexión y la renovación espiritual. Una de estas prácticas significativas es la visita a los siete templos, una experiencia que trasciende la mera observancia para sumergirse en un profundo acto de devoción y conexión con la historia bíblica. La tradición, que se inicia la noche del Jueves Santo y culmina en la mañana del Viernes Santo, tiene sus raíces en Roma gracias a San Felipe Neri, y desde entonces ha reverberado en todo el mundo, convirtiéndose en un símbolo de respeto hacia Jesús y su sacrificio por la humanidad. Según la enseñanza de la Iglesia Católica, el Jueves Santo marca un momento crucial en la historia cristiana: la Última Cena de Jesús con sus apóstoles, donde instituyó los sacramentos de la Eucaristía y el Orden Sacerdotal. Este acto simboliza el inicio de un camino hacia la redención, hacia la reconciliación con el prójimo y la interiorización de los valores de caridad promovidos por Jesús. Al recorrer los siete templos, los fieles no solo están siguiendo los pasos físicos de Jesús desde su captura hasta su crucifixión, sino que están participando en un acto de comunión espiritual, acompañando al Salvador en su trayectoria hacia el sacrificio y la resurrección. Cada uno de los siete templos representa una etapa crucial en este recorrido espiritual: Desde el Cenáculo hasta el huerto de Getsemaní, donde Jesús oró y sudó sangre. Desde el huerto de Getsemaní hasta la casa de Anás, donde fue interrogado y maltratado. Desde la casa de Caifás hasta la primera comparecencia ante Poncio Pilatos, donde fue acusado injustamente. Desde la confrontación con Herodes hasta la segunda comparecencia ante Pilatos, donde fue sentenciado a muerte. Finalmente, desde la casa de Pilatos hasta el Monte Calvario, donde Jesús cargó con la cruz, fue crucificado y sepultado. Cada estación de este camino sagrado invita a los creyentes a reflexionar sobre el significado más profundo de la Pasión de Cristo y a renovar su compromiso con los valores cristianos de amor, perdón y redención. La visita a los siete templos se convierte así en una experiencia transformadora que trasciende las fronteras del tiempo y el espacio, guiando a los fieles hacia una conexión más íntima con su fe y su salvación. https://www.tiktok.com/@mscnoticias
El Domingo de Ramos es el día que marca el inicio de la Semana Santa en la tradición cristiana, conmemorando la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. Este día está lleno de simbolismo y significado religioso para los cristianos, pero en términos de “misterios”, podrían interpretarse algunos aspectos simbólicos o teológicos: La entrada triunfal de Jesús: Este evento, mencionado en los evangelios, es la base del Domingo de Ramos. Jesús entra en Jerusalén montado en un burro, mientras la multitud lo aclama y lo saluda con ramas de palma y ropas extendidas en su camino. El misterio aquí radica en la comprensión del significado de esta entrada en el contexto de la misión de Jesús y su relación con el reino de Dios. El cambio de actitud de la multitud: Es intrigante cómo la multitud que aclama a Jesús en su entrada triunfal el Domingo de Ramos luego se convierte en la misma multitud que lo rechaza y pide su crucifixión pocos días después. Este cambio repentino de actitud puede ser objeto de reflexión sobre la naturaleza humana y la fragilidad de las lealtades populares. El simbolismo de las palmas y las ramas: En muchas tradiciones cristianas, se llevan palmas y ramas durante las celebraciones del Domingo de Ramos como símbolo de victoria y triunfo. Estos elementos pueden representar la victoria espiritual sobre el pecado y la muerte que Jesús trae consigo, pero también pueden ser interpretados como un recordatorio de la naturaleza efímera de los triunfos terrenales. El comienzo de la Semana Santa: El Domingo de Ramos marca el inicio de la Semana Santa, un período de intensa reflexión y conmemoración para los cristianos. Este tiempo está lleno de rituales y tradiciones que recuerdan los eventos finales de la vida de Jesús, desde la Última Cena hasta su crucifixión y resurrección. Los misterios aquí son los propios misterios de la fe cristiana: la pasión, muerte y resurrección de Jesús, y su significado para la salvación de la humanidad. En resumen, el Domingo de Ramos está envuelto en una serie de misterios religiosos y simbolismos que invitan a la reflexión y la contemplación sobre la fe cristiana y el significado de la vida y la obra de Jesucristo. https://www.tiktok.com/@mscnoticias